Bonny Cepeda clama por un merengue nuevo

Tota

Es coartífice del éxito en el merengue de Chantelle, Jailene Cintrón, Gisselle, Jessica Cristina y Daniela Droz.

Mucho antes de que estas jóvenes se lanzarán al ruedo, Bonny Cepeda ya había labrado una respetable carrera como solista. Y, en conmemoración de su vigésimo aniversario en las artes, el productor ha decidido reactivar su carrera como cantante con el lanzamiento del cd Legado, una antología de sus grandes éxitos en el merengue.

«Se había perdido momentáneamente el contacto con la gente al dedicarme a producir a otros artistas. Entendemos que esta producción recoge todo lo trabajado unos años atrás», señaló el creador de Asesina, Una fotografía, Cuarto de hotel 303 y Ay, doctor.

La intención de Cepeda, quien reside aquí desde 1986, es regresar a la tarima. Como se recordará, el artista se ausentó varios años de los escenarios, optando por canalizar su talento en la producción de discos.

Bonny Cepeda, quien regresa con el cd «Legado», considera que el merengue en Puerto Rico y Santo Domingo debe ser renovado.

Bonny fue uno de los artistas que tronó contra el escándalo en que a fines de los 80 se vieron involucradas los dueños de varios salones de baile y los programadores de algunas emisoras por la alegada payola y venta de influencias.

El incidente, sostuvo, no perjudicó su carrera.

«Yo estuve de la parte contraria a Jochi Hernández y José Medina», dijo al mencionar los nombres de los merengueros que denunciaron públicamente el escándalo.

«Me uní a la parte que defendía a los artistas que estaban sonando en el medio pero no necesariamente porque estuvieran pagando en la radio. Siempre entendí que podía ser dañino y lastimoso denunciar cosas que no iban a sumar nada al desarrollo y la promoción de nosotros.

Después del incidente dejé de grabar», expresó Bonny, en cuyo calendario aparecen producciones para Willie Berríos, La Fiebre y Kathian, cantante dominicana que proyectará con un estilo e imagen parecido al de Millie Quesada.

De los artistas que ha producido, le satisface particularmente el trabajo del boricua Maldo. «No ha sido el que más ha vendido, pero es un disco que me ha dado una gran satisfacción por el ser humano que es Maldo y por el contenido literario y musical que encierra la grabación», explicó Bonny, autor de Lo mío es mío, A qué vuelve y otros de los éxitos de Gisselle.

Bonny Cepeda es el paradigma perfecto de que el merengue no se le ha escapado de las manos a los dominicanos. Tras las producciones de los solistas y agrupaciones locales encontramos arreglistas dominicanos como Jaime Querol, Manuel Tejada e Israel Casado, quien se mudó a la Isla y originalmente le produjo -en la onda del merengue bomba patentizado por Los Rosario- a Grupomanía, Karís y otros.

En la producción del merengue la llave aún pertenece a Santo Domingo. Se apoderan de las ondas, empero, las canciones de Elvis Crespo, Grupomanía, Manny Manuel, Gisselle, Melina y Karís porque su contenido es más sutil y refinado. Cepeda opinó que el merengue que se produce en el vecino país, con la excepción de Juan Luis Guerra y Chichí Peralta, clama por la sofisticación de su contenido.

«Hubo una crisis porque estaba muy refranero. Que si la vaca, que si el venao… La misma radio dominicana me ha solicitado un mensaje literal más alto y un ritmo más cuidadoso. Javier Grullón, director de ocho emisoras de allá, me lo ha pedido. Y lo hemos complacido. Lo hicimos con Rikarena, que estuvo a punto de desaparecer. Y ahora, con Cuando el amor se daña, han triunfado. Yo dudo que canciones como La vaca se escuchen otra vez en Santo Domingo».

Con la autoridad que le confiere su experiencia, Cepeda considera que, musicalmente hablando, el merengue se ha estancado en Puerto Rico debido a la repetición del patrón de tónica y dominante en el estilo bomba. Bonny cree que se puede enriquecer con nuevas armonías y orquestaciones más elaboradas.

«Me preocupa porque va a llegar un momento en que todo va a parecer igual y va a venir la saturación. Por eso estamos tratando de variar en la bomba con ciertas variaciones en la repetición del sol-re y sol-re, como estoy haciendo con el grupo Código».

Irónicamente, un maestro del merengue como Bonny Cepeda es uno de los artistas que pagan en la radio dominicana para que sus discos se escuchen.

«Definitivamente, es como si fuera una ley. Aquí la emisora FM 103 lo hace. Se trata de la colocación de los discos a nivel comercial. A mi me gusta más así. Yo paso tres meses escribiendo, después grabo, me gasto $30 mil en sacar el disco, $10 mil en un vídeo y llego a la radio esperanzado en que alguien me toque y nunca lo tocan. Es más económico pagar $5 mil para que te toquen el disco como anuncio y que el público decida».

Así, pues, el cd Legado de Bonny Cepeda, conocido como El Mandamás, pronto debe entrar a la radio local con la reedición especial Sugar’s Mix. Aparte de los éxitos que regrabó, el cd contiene los estrenos Cuando llega el lunes y La domadora. Al merenguero de 46 años le aguarda un mes de intenso trabajo promocional en la Isla, para luego visitar Santo Domingo y Nueva York, donde hace alrededor de quince años fue un ídolo.