
Involucrado ahora en una nueva propuesta musical que radica entre lo popular y moderno, el famoso puertorriqueño comentó al diario costarricense La República en el marco de su gira promocional que aunque su estilo se ha mantenido, su voz ha cambiado de color.
“Aunque el estilo se ha mantenido, ha cambiado mi color de voz, antes era más agudo, ahora siento mi voz más madura, más contrastada”, apuntó el llamado “Caballero de la Salsa” al asegurar que se siente muy cómodo con el resultado final de su nuevo álbum.
La idea de mezclar diversos sonidos en su último trabajo surge por el deseo del artista de cautivar al público joven y ofrecer algo de variedad a los seguidores que siempre han acompañado su carrera, sin que ello signifique dejar de ser “un salsero tradicional”.
“Uno se mantiene haciendo propuestas, unas con más éxito que otras. Lo único que sé es que mi vida sin la música no tendría sentido”, señaló el cantante que con éxito presentó en Puerto Rico el concierto Dos soneros, una historia con el salsero Víctor Manuelle.
En cuanto al título que le da nombre a su nueva producción discográfica, Santa Rosa anotó que “el nuevo disco tuvo una producción muy intensa, por eso le pusimos así”.
En el marco de su recorrido por Centroamérica de la mano de su disco Intenso, el boricua visitará Panamá para presentar su propuesta y cantar el próximo viernes a cientos de mujeres privadas de libertad en un centro penal de la capital del país canalero.