
Al principio, cuando algunas de sus agendas tuvieron que alterarse, muchos pensaron que la industria del disco se “desmoronaba”, porque en momentos de luto y tragedia, nadie quiere saber de música alegre y asistir a conciertos.
Julio Iglesias, por ejemplo, no llegó a cancelar indefinidamente su concierto en la Plaza de las Ventas de Madrid para concluir su gira por España, pero lo aplazó hasta el 18 de septiembre.
Asimismo, el colombiano Carlos Vives no canceló la agresiva agenda promocional que tenía esta semana en Miami, pero la demoró unas semanas.
“Después de todo”, dijo Joe Bonilla, publicista de Julio Iglesias, “los artistas han querido guardar luto, porque ha sido un golpe duro en la esencia humana de todo el mundo.”
Bonilla, quien además es el publicista de otras grandes estrellas como Thalía y Shalim, asegura que la industria del disco está de pie con más vigor que nunca:
“Aunque ha sido un choque emocional para todos, sabemos que tras todo evento trágico lo que se asoma es una esperanza: por la unidad y por la paz.
Como muestra de que están más unidos que nunca y deseosos de contribuir en algo por reactivar cuanto antes el estado anímico de Estados Unidos, el grupo de artistas que sigue “varado” en Los Angeles, se unió el viernes pasado para realizar un concierto a favor de las víctimas del atentado terrorista.
Entre las primeras en unirse al evento estuvo Celia Cruz quien dijo: “Me siento muy dolida por lo que ha pasado, Estados Unidos es un país que me ha acogido con un gran cariño por muchos años”.
El resultado: Paulina Rubio, Celia Cruz, Juanes, Ruben Blades, Isaac Delgado, Bacilos, Aterciopelados, Laura Pausini, Vicky Carr, Amigos Invisibles y otra serie de artistas cantaron esa noche gratuitamente para recaudar fondos y entregárselos a la Cruz Roja.
Adolfo Fernández, Director Artístico de F&F Media- empresa que dirige las relaciones públicas de Willy Chirino, Lissete, Enrique Iglesias, Toño Rosario, Juanes, Eduardo Verástegui y Alicia Villareal- dijo que quiere que las figuras que representa hablen en la televisión de lo que sienten, pero que traten de reanudar sus agendas lo más pronto posible.
El cantante colombiano Juanes, según Fernández, “está muy abatido por todo lo sucedido. No hay que olvidar que es un joven muy sensible y que este problema le toca de doble manera: en su repertorio hay mucho vaticinio de todo lo que se está viviendo, pues sus canciones (nominadas a siete Grammys) reflejan el terrorismo y espanto que ha vivido su país y que ahora le ha tocado ver en este”.
Aunque no quiso entrar en detalles sobre la agenda de Thalía, Bonilla también manifestó que Thalía seguirá trabajando “tan duro como antes. Su disco es todo un éxito y ella tiene muchos proyectos importantes por venir”.
Tanto Bonilla como Fernández ven el futuro de la industria del disco hispano con optimismo: “Las civilizaciones y la humanidad siempre ha tenido la capacidad para reinventarse y rebasar las crisis mas catastróficas de la historia”, dice Bonilla.
La industria del disco está respondiendo con tanta fortaleza a todo esto, que incluso ya se habla de retomar las riendas del Grammy Latino.
Como el luto no se ha borrado, los protagonistas quiere encontrar un equilibrio entre el duelo y su negativa a que el terrorismo detenga sus actividades.
De allí que se baraje la posibilidad de realizar una ceremonia muy íntima entre los nominados y algunos selectos invitados en un lugar no determinado que podría ser Miami o Los Angeles, antes de que concluya el mes de septiembre.
“La conclusión de todo esto”, apunta Fernández,”es que la música hispana está de pie y va a salir airosa. Los que vivimos en Miami ya lo vimos: tras la tragedia del huracán Andrew, en 1992, convertimos el revés en victoria. EFE