
A su salida del tribunal, Don Omar se proyectó atribulado en lugar de contento, y no emitió ningún comentario relacionado con su victoria.
Su madre Luz Rivera expresó a PRIMERA HORA entender la actitud de su vástago, pues “yo lo conozco, sé de sus sentimientos y me imagino cómo se siente. Esto ha sido bien fuerte”.
Luego de las siete horas que duró la vista preliminar, en la que el ministerio público estuvo compuesto por Edwin Rivera, Carlos López y Reynaldo Santiago, la jueza Rivera Quiles no encontró causa para juicio tras escuchar el testimonio de agente Neftalí Molina, quien intervino con el artista el pasado 7 de septiembre de 2004.
Don Omar fue arrestado para esa fecha en la calle Andalucía, de la urbanización Vistamar, en Carolina, al supuestamente ser sorprendido fumando marihuana dentro de su guagua Hummer color blanca de 2004, junto a Rafael Morillo Concepción y Luis Rodríguez Camacho.
En la audiencia se discutió cómo fue la intervención del artista junto a los otros dos imputados, y se mostró el papel de la primera prueba de campo que dio negativo a la droga de la marihuana.
El agente Neftalí Molina se contradijo en varias ocasiones ante las preguntas del abogado de Don Omar, Joaquín Monserrate, e incluso dijo cosas que no estaban en su declaración jurada, como que al momento de su arresto el cantante y compañeros estaban “espaciaos”.
Tampoco pudo explicar al letrado de la defensa el hecho que, presuntamente, el artista dejara una pistola con el número de serie mutilado en su regazo, sin esconderla, mientras el agente intervenía con los otros implicados.
Al igual que Don Omar, Luis Rodríguez Camacho salió libre de culpa, aunque Rafael Morillo Concepción resultó culpable, en otro proceso, por la posesión de sustancias controladas.
Un caso fabricado
El letrado, que provocó la queja de los fiscales por su estilo un tanto cínico y gracioso de litigar, comentó a los medios que “ustedes estuvieron ahí y ven cómo se abusa del testimonio estereotipado. Afortunadamente, se pudo demostrar que no existen tantas casualidades”.
“Esta tarde fue increíble. Este policía sabía perfectamente el carro de Don Omar (pues alegó no conocerlo) y estuvo persiguiendo el carro hasta que dio con ellos”, sostuvo.
Respecto a la vista en alzada, que será el viernes 4 de marzo, Monserrate dijo que se preparará “nuevamente, porque esto es sólo una parte de la lucha”.
“Confiamos que el juez que tenga el caso lo evalúe como lo hizo la juez (Rivera Quiles), con mucha valentía, porque hay muchas presiones”, acotó.
Fiscales no se dan por vencidos
Insatisfecho con la determinación de la jueza Inés Rivera Aquino, el fiscal Edwin Rivera tiene esperanzas que en la próxima vista “podamos demostrar la prueba”.
“Esperábamos que se le encontrara causa probable, pero la juez no lo entendió así y lo respetamos. Pero iremos en alzada. El testigo no estuvo inconsistente. El licenciado de defensa tiene una forma particular de hacer sus preguntas y tal vez el testigo no entendió muy bien”, apuntó.
Asimismo, su compañero Carlos López indicó a este diario que no utilizaron al otro agente Arnaldo Hernández como testigo, porque “entendimos que con este testigo teníamos el caso (gano)”.
“Yo defiendo el testimonio de Molina. Se mantuvo en su versión pero aquí se pretende que haya una perfección en todo. Tres personas persiguen unos hechos y lo describen diferente, y no significa que estén mintiendo. Nosotros conocemos a este agente, lo avalamos y lo defendemos”, afirmó López.