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Luis Lebrón supera los excesos

Tota
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El primer cantante de la orquesta de Tommy Olivencia, Luis Lebrón, sustituido por Chamaco Ramírez, se deslumbró con la popularidad del principio de su trayectoria de más de cuatro décadas.

Dice que la flexibilidad que le proveía ser cantante y músico lo llevó a excederse con el alcohol y a coquetear todo el tiempo con mujeres.

Y, aunque las experiencias que vivió formaron al ser humano de hoy, si pudiera cambiar algún episodio de su existencia, sin titubear, comenta que se arrepiente de haberse excedido y de divorciarse de su primera esposa, María Reyes. Su separación ocurrió en 1960 tras siete años de unión.

Pero, el destino lo puso nuevamente frente a Mary, como le llama, en 1984, cuando era inaguantable su cirrosis, enfermedad caracterizada por una lesión en las vísceras, especialmente en el hígado.

En ese año, inició su sanación física y espiritual, que lo condujo a dedicarle su talento a Dios.

Luis Lebrón, de 79 años y natural de Arroyo, indica que, con la ayuda de su esposa, le agradeció a Dios “encontrarme de nuevo después de haberme perdido”.

Tras recobrar su voz, pues su condición de salud en aquel entonces se la había atrofiado, decidió encomendar su trabajo musical al Señor. Primero, grabó “Cambió mi vida” y ahora presenta “Obra de arte”.

“Con ‘Obra de arte’ quiero decirle a la gente que Dios puede hacer cambio en la vida del hombre. Estuve mal y ya desde mi encuentro han pasado más de 20 años”, apunta el cantante, quien debutó en el programa “Tribuna del arte”, de Rafael Quiñones Vidal, y formó parte del Grupo Canario, entre otros conjuntos.

“Obra del arte” contó con la producción y dirección musical de Machi Rodríguez.

“La Voz de Oro de Puerto Rico”, como se le conoce, está radicado en Tampa, Florida, hace dos años. Allí, junto a su esposa, de 66 años, une esfuerzos para levantar una institución religiosa. Ambos son fundadores de la Iglesia Unidos por Jesucristo, en Levittown.

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