De vuelta a la melodía Nano Cabrera

Tras cinco años sin grabar un disco, Nano Cabrera presenta su nueva producción, titulado De regreso a la melodía, con temas en su mayoría de su inspiración y el debut de su hija, Carla Patricia, como compositora.

“Decidí hacer un disco muy personal, en el que se le canta al amor en todas sus facetas. Al amigo, a la pareja, a Dios en particular, a la patria, además es muy rítmico. Traté de poner todo eso que tenía dentro de mí y lo desbordé en esta producción”, expresó Cabrera a El Nuevo Día.

Los temas incluidos en la producción de su propio sello, NC, son de Manuel Pérez Botija, Edgardo Huertas y su hija de 27 años, Carla Patricia, que ha titulado, Mi corazón. “Después de un despecho, le dije a ella que escribiera la letra que yo le hacía la música y salió de inmediato”, recuerda.

Otro de las canciones es Jesús, que según el cantante llega cuando la persona toca fondo. También está Pastorella, un homenaje a su entrañable amigo Tony Croatto, quien murió el pasado año. “Queríamos hacerle un homenaje y me acordé que en el 1967 cuando él llegó a Puerto Rico me enseñó está canción de su natal Italia que era de campo, en un intercambio cultural cuando le enseñé, El eco de un carretero. La grabé tal y como me la enseñó, con la guitarra, y quedó preciosa”.

Aunque ha tenido una carrera fructífera con más de 16 producciones discográficas, Nano confiesa, a veces sentirse decepcionado de que en la Isla no se cultive más la música autóctona.

“En México por ejemplo, puede darle paso a otros ritmos como la quebradita, pero su cultura va por encima de todo. En la radio hay espacio para la música autóctona, de igual manera ocurre en Venezuela y en cualquier país del mundo, y lo afirmo porque he tenido la dicha de viajar, donde único ocurre es en esta Isla. Tenemos que empezar a querer un poco más lo nuestro porque es la carta de presentación de los puertorriqueños, la bomba, la plena, la salsa y hasta el reggaetón porque es lo que le vamos a dejar a las demás generaciones”.

Este año Nano Cabrera vuelve a actuar en Alemania, Austria, Inglaterra y otros países de Europa en donde ya su música es reconocida.