
Ésta es la segunda ocasión en que la fiscalía se va en alzada.
La determinación del juez César Almodóvar Marchani se basó en las incongruencias encontradas en el testimonio del agente Gerardo Berríos que se apartaban de su declaración jurada de agosto del año pasado.
“Es obvio que se ocupó material delictivo, pero hay que ver si se acepta la manera de intervenir (de los agentes)”, señaló el magistrado segundos antes de su determinación de “no causa” en la sala 205.
Parte de la decisión del togado se basó, al parecer, en la dudosa explicación del agente, quien alegó haber observado a Domingo Quiñones y a Eddie Rodríguez Torres con una bolsa plástica en sus manos, a unos 40 pies de distancia del edificio 22 del residencial “Felipe Sánchez Osorio” en Carolina.
El agente sostuvo que al estar entre 10 y 15 pies más cerca de los acusados, aún seguía viendo la misma bolsa con droga adentro, cuyo tamaño era de aproximadamente nueve pulgadas.
Domingo Quiñones fue arrestado el 5 de julio de 2005 junto a Eddie Rodríguez Torres, quien figura como coacusado en el caso.
Los agentes Gerardo Berríos y Carlos Toledo, de la División de Drogas de Carolina, les ocuparon nueve sobres de heroína, cuatro bolsas de cocaína, tres cápsulas de crack y $120 en efectivo.
En la vista preliminar, el Ministerio Público estaba compuesto por las fiscales Elba Acevedo y Ana Quintero, y los abogados de la defensa por Luis Aponte Martínez y Eduardo Ayala.
Debido a que es la segunda ocasión en que la fiscalía se va en alzada, el salsero no pudo disimular su descontento y asombro.
“La verdad va a prevalecer y el pueblo de Puerto Rico va a saber quién está con la verdad. Veo esto como una victoria de mi parte, porque ya van ocho meses de lo que me ocurrió. He seguido bien, gracias al Señor, no me ha faltado nada, y esto lo que me ha hecho es que me ha afectado económicamente, pero tengo cosas que el dinero no puede comprar”, dijo ante los medios del país, mientras esperaba en el segundo piso del tribunal.
El artista que hoy, martes, grabará junto a los raperos Vico C y Funky un tema para su próximo disco, añadió estar “tranquilo y con la frente en alto. Lo hice una vez de poder levantarme. Conozco la fórmula efectiva y Jesúcristo no va a permitir que yo caiga en vergüenza ajena”.
En un aparte con PRIMERA HORA el artista, que tiene en agenda dos filmes con Paramount Pictures y una obra de teatro fuera de la Isla, comentó tener su estado anímico fortalecido, pese a que “nunca había estado envuelto en este tipo de revolú. En términos de las cuestiones legales, en la vida pensé que esto era inconsistente y sucio”.
“Lo que hice lo consideran como algo súper negativo y lo que ellos hacen (la fiscalía) al tener dos veces no causa. No sé qué están buscando. Me he prestado a dopaje y me he ofrecido a todo. Estoy en un discipulado y un hogar por orden voluntario. Siempre he sabido de lo que he carecido y las áreas débiles que he podido identificar. También, tengo que defender lo que no es verdad y la verdad saldrá a flote”, sostuvo.
Ocho meses sin trabajar
El intérprete de “Se necesita un milagro”, que trabaja en sus discos “La evidencia: Parte I” y “La evidencia: Parte II”, asegura llevar ocho meses sin trabajar en Puerto Rico a raíz de su acusación por drogas.
Quiso aprovechar la entrevista para “decirle a los clientes de los promotores que me contrataban y que están bien asustaos porque no saben lo que es una alzada, que entiendan que esto es un proceso que le ha pasado a otros artistas y han seguido trabajando”.
“Llevo ocho meses sin trabajar aquí y los entiendo, porque los clientes creen que uno va a ir preso. Yo estoy con la verdad”, acotó acompañado de su inseparable esposa Sonia Ortiz.
PRIMERA HORA trató de obtener una reacción del agente Gerardo Berríos, pero éste salió veloz del tribunal sin querer comentar respecto al caso.