Gloria Estefan Inaguro el Centro Carnival de Miami
Fue el momento en que la calle más famosa de la ciudad, Biscayne Boulevard, cuya existencia se remonta a 1928, enterró un pasado de decadencia para dar paso a un presente en el que un escuadrón de camarógrafos se asentará frente a una alfombra roja permanentemente.
Era, sin duda alguna, la mejor noche de todas para vestir con el estilo Miami chic. Elegante pero no demasiado. Al estilo neoyorquino pero con mangas cortas.
Nadie mejor que el reconocido diseñador local René Ruiz para saberlo. El fastuoso evento de anoche, aguardado por más de dos décadas, le había traído a su atelier en Coral Gables a más de una docena de distinguidas clientas que ansiaban brillar en la ”gran noche de Miami”, sin importar el precio.
”Nunca había visto una cosa semejante”, confesó el diseñador minutos antes de entrar al estreno, con un concierto protagonizado por el símbolo por antonomasia de la música de Miami, Gloria Estefan. “Por un momento sentí que se trataba de las Navidades”.
Bajo la sombra de la torre Art Deco de Sears, un grupo de rumberas y guaracheros arrollaron por las calles, seguidos por tamboristas japoneses y músicos de samba que invitaban a los más osados a sumarse a su línea de conga. Súbitamente, una nube de confeti multicolor y estruendosa explosión de fuegos artificiales marcó la hora de proceder a la alfombra roja.
”Es oficial, es magnífico y finalmente está aquí”, afirmó el legendario trompetista y arreglista Quincy Jones, quien actuó como maestro de ceremonias en el auditorio Knight. “Veremos como la historia se despliega en un escenario en el que incontables sueños se harán realidad. Desde este momento en adelante Miami no será la misma”.
Protegidos por un batallón policial, cerca de una protesta de sus compañeros y otros empleados de la Ciudad de Miami, todos los integrantes del who’s who de las artes marcaron su presencia, con Lamborghinis y limusinas para asistir a la apertura de un centro que costó $460 millones y dejó atrás cinco años de grúas y construcción polvorienta.
”Este es el día de la realidad”, declaró emocionado durante la ceremonia de apertura, el presidente y director ejecutivo del Centro Carnival, Michael Hardy.
Por la alfombra roja desfilaron todo tipo de celebridades locales, desde Lili Estefan luciendo un vestido vintage del diseñador Gian Franco Ferrer que ”rescató” del guardarropa de su tía adoptiva Gloria Estefan, hasta Albita con un llamativo vestido púrpura de Silvia Tcherassi.
Alrededor de las estaciones de quesos y ceviches, donde los visitantes degustaban el roncal español o el gruyere suizo entre sorbos de champaña, las conversaciones giraban en torno a parajes europeos, comentarios sobre la arquitectura de César Pelli y hasta procedimientos de cirugía cosmética.
El concierto no careció de sorpresas, como la aparición de los tres basquetbolistas estrella del Miami Heat al comienzo. Shaquille O’Neil, Alonzo Mourning y Dwayne Wade irrumpieron en sus uniformes rojos y el rebote de sus pelotas se acopló a la instrumentación orquestal de trasfondo, generando una ovación masiva.
Como bien señaló Gloria Estefan al iniciar el espectáculo, ”Miami puede ser muchas cosas, pero nunca es aburrida” y lo inesperado está a la orden del día.
”Esto es tan emocionante, es la primera vez”, exclamó Sylvia Farina, una miamense de 60 años, al ver a la diva cubana que emergió del nivel subterráneo del escenario en una plataforma ovalada, cortando la respiración con un deslumbrante vestido de lentejuelas marfil. “Todo aquí huele como si acabara de ser terminado”.
La antigua líder del Miami Sound Machine y homegirl o ”chica del patio”, como se describe, interpretó un popurrí de grandes éxitos latinoamericanos como Alma llanera, La bikina, Gracias a la vida, La piragua y Odiame. Aunque el variado repertorio incluía desde tangos como El día que me quieras hasta la samba Mais que nada, la cantante cubana hizo hincapié en el cancionero de la Cuba Dorada, con piezas como Cuando salí de Cuba, Capullito de alelí y Lágrimas negras, que despertaron la nostalgia de sus compatriotas.
Otros íconos como Alejandro Sanz, Carlos Vives, el tenor José Carreras, Cachao, Arturo Sandoval, Andy García, Albita y la actriz de Broadway Bernadette Peters completaron el elenco de performers.
”Tengo un amigo que decía que Miami estaba muy bien, pero no tenía temporada de ópera”, dijo el cantante español Alejandro Sanz, quien reside en esta ciudad. “La próxima vez que me lo diga, lo mando a callar”.