Canto al despecho lo nuevo de Carlos Vives

Tota

Con los acostumbrados elementos de su música típica de su país, Colombia, y una evidente influencia de la música puertorriqueña que lo ha marcado, Carlos Vives reaparece en el panorama musical con una producción que ha titulado Déjame entrar.

Esta vez, se mueve entre lo alegre y lo tradicional, lo romántico y lo nostálgico con el propósito de continuar exponiendo ese género con el que confiesa estar obsesionado, el famoso vallenato. «Estoy convencido del potencial que tiene este hijo de la cumbia y el resto de nuestros ritmos. Con la unión del acordeón y la gaita frente a los teclados, la guitarra y los bajos presiento que estoy cerca de cumplir otro gran sueño», afirmó en entrevista con El Nuevo Día.

El artista, quien piensa que es un dolor «sabroso» el que se produce cuando se sufre por una mujer, asegura que su propuesta tiene la capacidad para tratar de manera distinta el tema del despecho. Por esa razón, la mayoría de los diez temas incluidos se pasean por esa línea.

Déjame entrar, tema que se escucha en la radio local y con el que se dio nombre a esta producción, podría ser el ejemplo perfecto de su peculiar perspectiva sobre el amor. Se trata de una romántica historia en la que un hombre enamorado pide una oportunidad para demostrar sus sentimientos.

Para acompañar su difusión, se encargó al director Oscar Azul trabajar un concepto visual que cobró vida en la sabana de Bogotá. «Entre ovejas, tractores, chimeneas, ranchos y preciosas flores, ubicamos como figura principal a esa mujer que trabaja la tierra», explicó.

En cuanto al resto de los temas, el «Gallito Ramírez» destacó Santa Elegía, el cual adquiere en estos difíciles días gran validez por relatar un triste evento histórico; Papadio, con el que pide a la sociedad que regrese a los valores fundamentales; y Décimas del parecido, donde se hace evidente esa «enfermedad que tengo para que todos los sitios a donde voy se me parezcan a Barranquilla».
Con un repentino viaje que le regresó al proceso de producción, el cantautor confesó que siempre procura estar cerca de los productores para proteger sus ideas. «Al principio no estaba clara para la industria la intuición de lo que queríamos. Sin embargo, esta vez sentí una mayor conexión con Emilio Estefan», destacó.

Sobre sus planes para presentar el nuevo disco en mercados internacionales, Vives mostró tener algunas reservas. Según dijo, prefiere continuar en los mercados centroamericanos y en aquellos donde sienta que «culturalmente seamos hermanos».

El mes pasado, Déjame entrar fue lanzado en España, mientras que Colombia ocupaba el próximo turno. A partir del próximo 13 de noviembre, le tocará a Miami, Nueva York, Los Angeles, Texas y California, entre otras ciudades.
«Este disco surge de un proceso que nace con los anteriores y que adquiere pretensiones modernas. Sé que nos reafirmará y nos dará mayor solidez», concluyó.

«PR Cambió mi vida»
Antes que finalice el año, Carlos Vives espera venir a Puerto Rico para trabajar y vacacionar. Pues, según confesó, cada 13 de diciembre el área de Mayagüez se convierte en su destino principal.
«Siempre vamos para que los niños compartan con sus abuelos. Además, siempre esperamos a los Reyes Magos en Boquerón», expresó.