Con su verbo elegante, el veterano locutor Francisco A. Báez Gauthier anunció que la celebración del vigesimosegundo aniversario de WRTU Radio Universidad sería dedicada al autor de Anacaona, La tirana, Salsaludando, La esencia del guaguancó y Periódico de ayer.
El director de la Escuela de Comunicación Pública, Eliseo Colón Zayas, destacó que Tite es una figura cimera del arte y la expresión musical mundial.
El rector George V. Hyllier, por su parte, dijo que es un baluarte de la música caribeña y del pentagrama popular.
En nombre del presidente de la Universidad, Antonio García Padilla, su ayudante Sylvia Alvarez de Curbelo expresó que Tite es un maestro de la cultura.
En la semblanza leída por Laura Candelas, Dinorah Marzán lo reconoció como un doctor de la rumba, subrayando que Tite “es grande como compositor porque es inmenso como ser humano”.
Sin embargo, el clímax del homenaje se registró cuando el artista plástico Denis Mario Rivera develó un mural inspirado en Tite. Oda al Tite caribeño y poeta. Una verdadera obra de arte que evoca y perpetúa la fortuna de haberse cruzado con La Lupe y su eterno respeto a las caras lindas de su gente negra.
Tite, cuyo nombre fue asignado al estudio de grabación digital de Radio Universidad, aceptó el homenaje con voz entrecortada.
“Yo no paro de escribir porque esa es una dádiva de Dios que aprovecho”, dijo al afirmar que los puertorriqueños “son la gente que más quiero en la vida”.
Acto seguido, se escucharon mensajes grabados de Johnny Pacheco, Soledad Bravo y Rubén Blades. Pero el que más profundo caló en Tite fue el de Cheo Feliciano. En vivo y a todo color. Desde su corazón. Le dio gracias por la vida, porque si no acepta su consejo de ingresar al Hogar Crea posiblemente hoy estuviera muerto o tras las rejas.
“Descubrió el talento en mí. Fue mi amigo antes de conocerlo. Fue un buen sastre que siempre cortó la música a mi medida”, indicó Feliciano, quien le popularizó los temas Anacaona, Mi triste problema, Los entierros, Juan Albañil y muchos más.
Cheo lo conmovió aún más cuando, acompañado por el pianista Martín Nieves, le cantó el bolero Franqueza cruel, estampado en el álbum Cheo, que contiene el éxito Anacaona.
En representación del estudiantado del recinto, los jóvenes Saida Almazri y Wilfred Serrano lo saludaron con Temes.
La cantante Choco Orta le dedicó el bolero Carcajada final que le compuso a La Lupe y más adelante Andy Montañez, mientras los presentes marcaban la clave, lo saludó con El eco de un tambor.
El compositor, de 75 años, tarareó sus canciones con la complacencia de la primera vez.
Solidario con los compositores
Tite Curet Alonso, quien registró su catálogo con la Asociación de Compositores y Editores de Música Latinoamericana (ACEMLA), reiteró su compromiso con los autores del patio.
“Lo que ACEMLA está buscando es nuestro bienestar. Hemos encontrado escollos, porque en un barrio donde no van los policías, todos hacen lo que les da la gana. Y ACEMLA es un guardían musical”.
En entrevista con El Nuevo Día, Tite aseguró que no ha cobrado por la música de su catálogo que se ha utilizado en las obras ¿Quién mató a Héctor Lavoe?, La Lupe, mi vida, mi destino y en el especial Con la música por dentro del BPPR.
“Y yo tengo dos hijos, Hilda y Eduardo, que son mis herederos y quisiera dejarles la vida resuelta económicamente hablando”, dijo Tite, a cuyo homenaje asistieron los artistas Sophy, Tony Croatto, Tommy Olivencia, Bobby Valentín, Cheo Feliciano, Choco Orta, Andy Montañez, Mandy Vizoso y Héctor Rodríguez, de Atabal.
© CARACOL S.A. Todos los derechos reservados.
CARACOL S.A. realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados.