El primero en salir al escenario fue Vargas, quien se ganó los entusiastas aplausos del público, a los que contagió y puso de pie con su música.
El merenguero, vestido con camisa blanca y pantalón oscuro, actuó precedido de los comediantes dominicanos Raymond Pozo y Miguel Céspedes, considerado el más dinámico dúo humorístico del país.
Desde que comenzó su presentación, Sergio Vargas, cautivó al público con sus canciones, entre ellas: Dile, Vete y dile y La Ventanita, tres de sus éxitos musicales más conocidos.
Minutos después de la presentación de Vargas, salió al escenario Fernando Villalona, considerado uno de los merengueros más populares de la República Dominicana.
Al carismático cantante dominicano le bastaron un par de canciones para que el público, que acudió a la Fortaleza Ozama, situada en la Ciudad Colonial de Santo Domingo, se pusiera a bailar a ritmo de su contagioso merengue.
Confundido, Tabaco y ron, Música latina, El gusto, Carnaval, y su popular Mi pueblo, fueron algunas de las canciones interpretadas por Fernando Villalona.
Tras una espera de más de media hora, subió a la tarima el cantante y compositor panameño Blades, quien arrastró con su música la audiencia.
Vestido de negro y con sombrero del mismo color, el también abogado y ganador de cuatro premios Grammy, se metió a los espectadores en el bolsillo con temas como Buscando Guayaba, Pablo pueblo y Mi patria.
Blades salió al escenario acompañado del grupo costarricense Editus con el que ganó el Premio Grammy del 2000 por el álbum Tiempos.
El concierto Por la paz, coincidió con el del cantante mexicano Luis Miguel, que se presentó en el anfiteatro de Altos de Chavón, en la Romana.
El concierto de Luis Miguel, ha sido reseñado tímidamente por la prensa local, ha sido calificado como inolvidable.
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