En la competición, también resultaron vencedores en la categoría “juvenil”, los puertorriqueños Gabriel Flores y Jessica Quiles; mientras que en la categoría de “infantil”, el triunfo fue para los también boricuas, Bruno Rodríguez y Ondara López.
La competición, que se celebró en la noche del domingo en el hotel Caribe Hilton en San Juan, contó con la participación de 24 parejas en representación de varios países, incluyendo, Colombia, Hungría, Suecia, España, Canadá y la ciudad de Nueva York.
Durante la actividad, que finalizó con un espectáculo de salsa, predominaron vestuarios con vistosos colores, mímicas, acrobacias, maromas, y todo lo que se puede inventar un bailarín para llamar la atención del jurado, que evaluó la presentación visual, la presencia escénica, el ritmo, la coreografía, la creatividad, la técnica, así como la interacción en pareja.
Aponte, ganador de la categoría “adultos”, expresó a EFE que lo más que le gustó de la competencia fue “el calor del público”.
“Fue increíble, fue una emoción super tremenda poder escuchar ese público aplaudiendo desde el principio. Yo quería ser los ojos del público para ver lo que estábamos bailando, porque estuvimos bailando por inercia, debido a todo el trabajo que hemos estado haciendo”, dijo Aponte, de 27 años.
Maryelis Molina de 26 años, y quien lleva dos años bailando con Aponte, mencionó que los planes futuros con su amigo incluyen “viajar el mundo, enseñar la salsa, nuestra técnica, y queremos hacer películas, de todo”.
La pareja, que reside en Nueva York, recibió $14 mil en efectivo.
Jessica Quiles, quien practica jazz latino, que su compañero de baile, Gabriel Flores, de 15 años, fue quien le enseñó los pasos de salsa porque “la salsa a mí no me entraba por´na”.
“Para lo que dimos hoy (el domingo) en la competencia, estuvimos como tres años practicando como pareja, porque sabíamos pero no era como ahora”, confesó Quiles a EFE, quien también ganó junto a Flores, el campeonato juvenil celebrado el año pasado en el “World Salsa Open”.
Bruno Rodríguez, de 11 años, manifestó que cuando ganó la competencia sintió “felicidad, llanto, de todo”.
El joven, residente de Ponce, expresó que lo que lo motivó a participar fue que el pasado año quedó junto a su compañera, Ondara López, en el cuarto lugar.
Mientras, la niña de 10 años explicó que la experiencia “fue algo especial, porque uno se siente triste, feliz, de todo a la misma vez”.
Ayer, lunes, inició oficialmente el Congreso Mundial de la Salsa, con exhibiciones, talleres y mucha música. Las actividades finalizarán el próximo sábado, 2 de agosto.
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