El cantante venezolano de padres argentinos tiene el difícil papel de reemplazar al animador Antonio Vodanovic, que renunció después de 28 años y sin razones conocidas. Algunas encuestas y un sector de la prensa coinciden en que podría ser rechazado con rechiflas la noche inaugural de hoy miércoles.
Montaner y su pareja en la animación, la cantante chilena Myriam Hernández, entre quienes existían rivalidades —según la prensa—, pasean su amistad por Viña del Mar, donde el venezolano intenta ganarse anticipadamente al público.
En la cena de gala del certamen, el lunes en la noche, Hernández llegó con un hermoso vestido lila, del mismo tono de la corbata de Montaner.
La prensa local dice que el salvavidas preparado por los organizadores ante una silbatina será un tema a dúo entre los coanimadores, ambos cantantes de mucho éxito.
La inauguración de la 46 versión del festival estará a cargo del colombiano Juanes y de los españoles de La Oreja de Van Gogh.
Juanes llegó el martes, poco después del arribo de la mexicana Julieta Venegas. El colombiano trae un espectáculo desconocido en Chile, donde su álbum Mi sangre ha vendido 20 mil copias, un récord en este país.
La Oreja de Van Gogh, con su probado éxito Lo que te conté mientras te hacías la dormida, está entre los favoritos del público junto al mexicano Marco Antonio Solís, cuyo tema Mi mayor sacrificio suena en todas las radios locales.
El último álbum de Solís, Razón de sobra, también ha vendido más de 20 mil copias.
Solís cerrará el certamen que se desarrolla entre el miércoles 16 y el lunes 21 en el anfiteatro al aire libre de la Quinta Vergara, un enorme parque de Viña del Mar, balneario sobre el Pacífico, 120 kilómetros al noroeste de Santiago.
La noche del jueves promete ser de la mexicana Paulina Rubio, conocida por sus temas Lo haré por ti y El último adiós. Le seguirá el español Raphael, que hace 18 años piso por última vez el escenario de Viña del Mar, pero que siempre es éxito asegurado entre las chilenas de todas las edades.
El cierre de la segunda jornada estará en manos de los argentinos Babasónicos, que seguramente presentarán el espectáculo de su disco Infame.
La llamada noche chilena será la del viernes, con las presentaciones del grupo Congreso; del baladista Alberto Plaza, que acaba de realizar un exitoso recital en este balneario, y de la banda de pop sofisticado Lucybell.
Los Hermanos Bustos, cantautores chilenos de rancheras, son una apuesta casi segura de los organizadores, porque son desconocidos en televisión, pero muy populares en casi todas las ciudades del norte y sur de Chile.
El pop mexicano estará presente el sábado con Julieta Venegas y su último trabajo Sí, que ya vendió 10 mil copias. Sus compatriotas de Café Tacuba mostrarán el trabajo Cuatro caminos y algunos temas de Vale Callampa.
Una de las bandas más esperadas cerrará la jornada del sábado, los chilenos de La Ley, que tienen para mostrar el álbum antológico Historias e histerias, recién lanzado y que incluye éxitos asegurados, como El duelo, Fuera de mí, Tejedores de ilusión y Mentira.
El español Miguel Bosé es otro de los números asegurados y, aunque su último trabajo —Velvetina— no es muy conocido aquí, sus temas anteriores son coreados por todos, lo que seguramente se repetirá el domingo, cuando inaugure la penúltima jornada festivalera.
Para el cierre, día que congrega tantos espectadores como la noche inaugural, los organizadores dejaron en la apertura al argentino Diego Torres, con 12 mil copias vendidas de MTV Unplugged y en la clausura a uno de los artistas más esperados por todos, el mexicano Marco Antonio Solís.
En el festival, además del espectáculo, compiten 10 canciones extranjeras y otras 10 folklóricas. Este año hay temas de Chile, Argentina, Colombia, Brasil, Perú, México, Estados Unidos, Canadá, Italia y España.
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