Milly y Gilberto Santa Rosa despiertan pasiones

Tota

La merenguera dominicana Milly Quezada y el salsero puertorriqueño Gilberto Santa Rosa despertaron pasiones durante un concierto en la noche del sábado que, aparte de memorable, ratificó la calidad y popularidad de ambos.

El escenario del remozado teatro Paradise, enclavado en el corazón del llamado condado de la salsa, el Bronx, permitió esta nueva unión de estos cantantes en una actuación de altos quilates.

Milly Quezada y Gilberto Santa Rosa tuvieron la responsabilidad de inaugurar el centro de presentaciones, remodelado con una inversión superior a los $ 14 millones.

El recital, cuyo anfitrión fue el estelar locutor Janeiro Matos, de la estación Mega 97.9 FM, reservó espacio para reconocer al célebre conductor radial puertorriqueño Polito Vega y a Raúl Alarcón, presidente del consorcio SBS (Spanish Broadcasting System).

La primera en recibir el calor de los aplausos del público, que llenó de “bote a bote” el Paradise, fue la reina del merengue Milly Quezada, quien recurrió a un manojo de éxitos como carta de presentación y luego en su espumosa voz se dejaron escuchar canciones de su más reciente apuesta musical, titulada “MQ”, realizada para J&N Records, que hace algunas semanas presentó en Puerto Rico.

“Buenas noches, mi gente bella, gracias por estar aquí”, expresó emocionada a una audiencia conformada mayormente por puertorriqueños y dominicanos.

Y de inmediato la descarga musical vino con temas como “Lo tengo todo”, “Entre tu cuerpo y el mío”, “En tus manos” y otros que marcaron la ruta para un estallido de emociones de sus admiradores, que no dejaron de corear cada interpretación.

El show incluyó participaciones con Miguelito, uno de sus hijos que forma parte de su agrupación merenguera. Con él cantó “Yo soy”, que grabó a dúo con el reputado músico dominicano Ramón Orlando.

Sentimientos a flor de piel

Gilberto Santa Rosa siguió la jornada. El calor con el público fue, como siempre, muy cercano al recibir aplausos de sus cómplices de la noche.

Algunas damas no pudieron contener la emoción y eso se manifestaba cuando seguían a coro algunas canciones. De hecho, temas como “Que alguien me diga” fueron demasiado fuertes para sus sentimientos a flor de piel.

Y eso se veía en los rostros como signo inequívoco de lo que cada palabra del tema que cantaba Gilberto Santa Rosa le producía en lo más adentro de su alma.

Ellas y nadie más sabían lo que le decía en voz alta aquel “Señor del Bolero”, pero fue tan sólo una de las tantas expresiones reales de lo que siente el público cuando se encuentra con Gilberto Santa Rosa.

La empatía entre el público y el sonero puertorriqueño es auténtica, porque cada vez que se presenta suceden escenas de telenovelas.

Significativo encuentro

Esta vez el encuentro era más significativo. Porque nuevamente Gilberto Santa Rosa y Milly Quezada se juntaban en un escenario, lo que incluso permitió que unieran sus voces en el tema “Para darte mi vida”, que ella grabó a ritmo de merengue junto al puertorriqueño Elvis Crespo, pero para esta ocasión se escuchó en versión de bachata-bolero para proporcionar mágicos momentos.

Gilberto Santa Rosa habló muy poco y apeló a su habitual “media sonrisa” y temas como “La conciencia”, “Perdóname”, “Amor mío” y otros para mantener a sus seguidores complacidos hasta el final en que se despidió con “La agarro bajando”.

Milly y Gilberto mantienen una estrecha relación profesional y de amistad, al punto de que en 2002 el sonero boricua le produjo el disco “Pienso así”, que a ella le valió un “Grammy Latino”.

Su recital de Nueva York pretenden repetirlo próximamente en Puerto Rico y República Dominicana bajo el título de “Milly y Gilberto, amigos por siempre”.

Para Quisqueya ya tienen reservadas las fecha del 24 al 26 de noviembre. Los escenarios dominicanos seleccionados son el teatro La Fiesta del hotel Jaragua, el Centro Español de Santiago y el Club Los Prados en Santo Domingo.

Aún se desconoce cuándo será en Puerto Rico.