Nicky Jam festeja el cumpleaños de Yarimar su Hija

El rapero detuvo el pasado sábado su agenda de trabajo para ayudar a la pequeña a soplar las velas de su tercer cumpleaños en una sencilla fiestecita en la casa de su abuela materna, en un sector en Cupey.

El cantante de «Chambonea» fue puntual, siendo el primero en arribar a la residencia a la hora señalada, las 5:30 de la tarde, teniendo así la oportunidad de compartir de manera tranquila con su hija y regalarle una inmensa canasta con una muñeca del personaje «Strawberry Shortcake» y un globo con el mensaje de «I love you» (Te quiero mucho).

Originalmente, Yarimar cumple años el 7 de febrero, pero su familia prefirió esperar dos semanas a que su padre tuviera tiempo libre.

La niña todavía no se adapta a su papá, por lo cual se mostró reacia, aunque Nicky Jam trató de buscarle la vuelta en varias ocasiones con el regalo, chistes, besitos y hasta la ayuda de los payasos invitados.

«Que se vaya acostumbrando», dijo su mamá Ariana Caraballo cuando veía que su retoño no sacaba ni una sonrisita para el lente fotográfico.

Nicky Jam no perdió la esperanza de hacerla reír y poder compartir con la niña, a pesar de que en la medida en que fueron llegando los invitados, prefirió dejarla disfrutar de las ocurrencias de los payasos Pimpilina y Cheesetrick.

«Me siento un poquito extraño porque es tremenda la ausencia del tiempo que no estuve. Es cuestión que, si uno puede pasar por cosas difíciles en la vida, pasar por esto no es nada. Esto es un regalo de Dios, aunque todavía estoy amoldándome», expresó el artista de 23 años.

Los invitados, que no sobrepasaron los 35 y todos familiares de la madre de la niña, a excepción del corista de Nicky Jam, David Ambulante, se mostraron amables con el artista, haciéndolo sentir como en la familia que, dice, nunca gozó.

El nombre de Nicky Jam, esa tarde, fue sustituido por el de «papi» o «papá».

«Está un poquito difícil (la nena), hay que acostumbrarse. No te puedo decir que estoy amoldado porque no hemos compartido bastante. La nena es media pasmaíta y eso es característica de la mamá porque yo soy un atrevido», indicó.

Yarimar, vestida con un traje rosita, sólo se acercó a su papá cuando su madre le envió a que le entregara un regalo.

Inocentemente, la nena le llevó al también padre de Alyssa, procreada en otra relación, una bolsita con un perfume adentro. Juntos abrieron el obsequio y así mismo se roció varias veces la fragancia.

Ariana Caraballo, de 23 años, paseó a Nicky Jam por la sala de la residencia, decorada con motivos de la muñeca «Hello Kitty», para enseñarle unas fotos adheridas a la pared, de los primeros tres años de Yarimar, de los que no formó parte el padre.

El rapero, quien actualmente busca fecha para la realización de su concierto en el coliseo «Roberto Clemente», que se llamará «Nicky Jam: vida escante», se despidió de Yarimar pasadas las 8:00 de la noche, debido a que tenía compromisos de trabajo en Trujillo Alto.

En términos de la realización de la prueba de paternidad, la abogada de Ariana, María Figueroa Lugo, indicó que se intentará realizar esta semana.