La diva del pop boricua visitó la redacción de El Nuevo Día y tras posar para el lente del fotoperiodista Xavier Araújo, conversó en torno a los secretos, curiosidades e interioridades de su trayectoria musical.
La carrera como solista de Ednita arrancó en 1973 con el lanzamiento del álbum Al fin con el sello Mardi Gras. Mas, para el conocimiento de su fanaticada, la intérprete comenzó platicando de su debut profesional con The Kids From Ponce, abonando así a una documentación fidedigna del paso a paso en su carrera musical.
De tantos recuerdos, ¿qué te complace de tus inicios con The Kids From Ponce?
“Son tiempos que fueron la base sobre la cual construí lo que soy hoy. Son inolvidables, porque encierran las primeras experiencias en la escena. Los ensayos con José Manuel Zambrana en las marquesinas, en el club deportivo de Ponce, en los cumpleaños y los viajes a San Juan, que eran como safaris, son absolutamente inolvidables”.
Del aprendizaje de aquellos días, ¿qué ha sido lo más provechoso para tu carrera?
“El interés en hacer un buen trabajo. Desde ese momento se manifestó en mí un deseo de agradar, de prepararme bien, con un gran sentido de disciplina. Recuerdo que muchas veces hice las asignaciones en los estudios de televisión. El sentido de compromiso ha sido lo más provechoso para mi carrera”.
¿Qué provoca en ti, 32 años después, tu primer disco “Al fin Ednita”?
“El otro día me senté a escucharlo después de mucho tiempo. Y traté de escucharlo desde un punto de vista objetivo y me sorprendió la cantidad de recuerdos y emociones, sobre todo porque desde tan chiquita yo abordaba canciones tan comprometidas”.
En esos días sobresaliste en la televisión con El Show de Ednita Nazario por Rikavisión, Canal 7. ¿Qué extrañas en la televisión contemporánea en comparación con aquellos días?
“Era más familiar y las temáticas eran diversas, para todo público. Fui la artista más joven con un programa de televisión en aquella época. Recuerdo que a veces en el salón de clases simulaba que estaba haciendo una asignación, cuando lo que hacía era escribir el libreto o el ‘rundown’ de las canciones que deseaba cantar”.
De los artistas que saltaron a la popularidad gracias a tu espacio, ¿cuál recuerdas de manera especial? ¿Hubo alguno que se dio a conocer a través de tu espacio?
“Rafael José estuvo en mi programa por primera vez y con él fuimos al OTI. Su lanzamiento como cantante se hizo a mi lado y me siento orgullosa, porque es una persona que quiero mucho”.
De la etapa con Borinquen Records, ¿cuánto quedó plasmado de la esencia de Ednita Nazario en el elepé “Mujer sola”, que produjeron tu entonces esposo Laureano Brizuela y el maestro Jorge Calandrelli?
“Calandrelli fue la fuerza creativa. Una de las personas que trajo a la mesa el nuevo sonido de la balada italiana. Un hombre con un gusto exquisito en cuerdas. Aprendí mucho con él. Fue uno los personajes más importantes en mi desarrollo musical. Un momento en que hice una transición de una música tradicional a una más universal”.
¿Ahora que se acerca diciembre, qué emociones despierta en ti el disco “Nueva Navidad”?
“Se hizo con la intención de atraer a la juventud con arreglos hermosos, pero con ritmos de disco y hustle, modernizando un poco los clásicos de la música navideña”.
Del umbral del 80 debes conservar gratos recuerdos, como tu participación en el Festival OTI con “Cadenas de fuego”. No ganaste, pero en una siguiente edición del festival triunfaste como compositora, junto a Laureano, con “Contigo mujer”, interpretada por Rafael José.
“OTI fue determinante, porque fue la primera vez que participaba en una competencia. Creo en compartir no en competir. Fue una experiencia interesante, porque aunque Cadenas de fuego no ganó, fue el éxito más grande que tuve hasta ese momento”.
¿Por qué no fuiste más consecuente en la composición de temas para otros artistas?
“Siento un cierto recelo a repetirme. Cuando uno escribe, sólo tiene su propia inspiración. A mí me gusta enriquecer el lenguaje lírico y musical con puntos de vista y sensibilidades de otra gente que hago mías”.
En la década del 80 surgieron éxitos como “A qué no le cuentas”, “La prohibida” y “Mi pequeño amor” que te consagraron como baladista romántica. ¿Es la década de los 80 la más importante en la carrera de Ednita, pensando en que a mediados de la misma salió “Tú, sin mí”, el cual te proyectó con éxito en México?
“Fue el comienzo de mi carrera internacional, a pesar de que antes había ido a España y a Mónaco. Mi carrera musical comienza cuando hay un trabajo coherente discográfico. Los procesos no germinan hasta que no hay discos y presencia radial en otros países. Y mi carta de presentación fue A qué no le cuentas. Tú, sin mí fue importantísimo porque reafirmó todo el proceso anterior”.
¿Qué recuerdas de tu debut en Bellas Artes?
“Recuerdo que Más que nunca hoy fue mi primer concierto en Bellas Artes. Era como debutar en el Carnegie Hall. Yo me pellizcaba porque era uno de los grandes sueños que tenía todo el mundo. Es un momento que no puedo olvidar, porque fue cuando me reencontré para comenzar mi relación personal con el padre de mi hija. Luis Angel vino desde Estados Unidos a verme, porque éramos amigos”.
¿Entiendes que Luis Angel fue mucho mejor sastre musical para Ednita Nazario que Laureano Brizuela?
“Yo tengo una identificación musical, aparte de la personal, mucho más sólida con Luis Angel. Entró en un momento de mi vida en que me ayudó a decir cosas que han sido verdaderas aportaciones musicales a lo que es el lenguaje de esta servidora”.
En “Corazón”, Luis no participó. Muchos consideran este álbum la obra cumbre de la discografía de Ednita. ¿Estás de acuerdo?
“Fue un proyecto interesantísimo desde todos los puntos de vista. Era una combinación que parecía incombinable. Era como mezclar chinas con botellas, pero tanto Robi Rosa como yo teníamos la certeza de que la combinación iba a dar como resultado algo interesante, porque ambos estábamos locos por hacer algo completamente distinto y novedoso”.
¿Por qué no se capitalizó la excelencia y el impacto de “Corazón” a nivel internacional en tu carrera?
“Yo a veces me lo pregunto. Muchas veces nuestra presencia o ausencia en mercados internacionales propicios para nuestra música tiene poco o nada que ver con nuestro interés, porque son decisiones burocráticas, corporativas y discográficas. A mí me han tocado muchas transiciones dentro de las compañías discográficas con las que he estado. Corazón fue uno de esos momentos”.
¿Consideras que al Angelo Medina enfocarse en las carreras internacionales de Ricky Martin y Robi Draco Rosa no manejó la tuya como correspondía en otros mercados?
“Angelo estuvo mucho tiempo dedicado a Ricky. Yo le decía a Angelo que no necesitaba un ‘baby sitter’, sino un estratega. No necesito una persona que esté conmigo todo el tiempo. No puedo decir con certeza que él descuidó mi carrera. Sé que no es Dios y que no puede estar en todas partes. Hubo momentos que se aprovecharon, pero hubo otros que se pudieron aprovechar mejor”.
¿Qué aprendiste de tu participación en “The Capeman”, el musical de Paul Simon en que trabajaste junto a Rubén Blades y Marc Anthony, y por qué no la capitalizaste en nuevos proyectos dramáticos?
“Me interesó, pero el momento en que salí de la obra hubo una transición con mi firma con Sony. Pero Broadway es una puerta que continúa abierta, porque me han llamado para nuevas audiciones. Para estar en Broadway tendría que detener mi carrera discográfica por año y medio, y no lo puedo hacer”.
En vísperas de tu espectáculo “Apasionada”, ¿cómo Ednita define la pasión?
“La pasión ilumina la razón, porque es el motor y la energía que necesitamos para vivir con intensidad y con ganas. De eso se trata la vida”.
¿Se puede desear a un hombre sin amarlo y viceversa? ¿Eso es posible para ti?
“El amor se manifiesta de muchas formas y creo que se puede amar sin que exista el elemento del deseo carnal y físico. Y también puede existir atracción física fuerte sin que exista amor”.
A estas alturas del juego, ¿qué se siente al ser la diva de Puerto Rico?
“Ja, ja, ja… Esa palabrita me parece muy simpática porque para mí diva es María Callas. Diana Ross, Barbra Streisand lo son… Yo sé que ocupo un lugar muy especial en el corazón del público y eso me conmueve. Lo agradezco y humildemente lo recibo con mucho cariño. Es la forma de la gente demostrarme que todos mis esfuerzos no han sido en vano”.
De cara al futuro, ¿cómo contemplas renovar tu propuesta para continuar como la diva de Puerto Rico?
“A mí me interesa la música y todo lo que me provee. Ese es mi foco. Ya estoy trabajando con el disco nuevo y va a ser muy divertido”.
Observamos una tendencia en términos de figuras establecidas que se acercan al hip-hop, al reggaetón y a otras corrientes contemporáneas. ¿Sucederá con Ednita?
“Hay productores y compositores del género del reggaetón con los cuales me gustaría trabajar, pero no haciendo reggaetón porque le tengo mi respeto al género. Pero me encanta la fusión y experimentar con otros sonidos”.
Hemos observado que te proyectas como un símbolo sexual, un poco más atrevida en tus vídeos. ¿Eso es parte de la nueva imagen de Ednita Nazario?
“Es que las canciones de Apasionada son líricamente muy comprometidas y bastante explícitas. Una amiga me dijo hace unos días que me esmandé en las escenas de A que pides más. La canción no habla de pajaritos ni de maripositas. Hacía tiempo que yo no era la protagonista de uno de mis vídeos”.
Después de convertirte en el primer talento del patio que vende tres funciones en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot, ¿cómo reciprocarás el respaldo de tu público?
“Entregándome en cuerpo y mi alma”.
¿Tienes planes de continuar trabajando con Empresas Angelo Medina?
“Tenemos una relación de mucho respeto y muchos años. Somos muy buenos compañeros de trabajo. Conozco sus fortalezas y debilidades, y viceversa. Nos complementamos bastante bien. Soy en gran medida dueña de mis decisiones”.
¿Consideras que ahora que no está al frente de las carreras internacionales de Robi Draco Rosa y de Ricky Martin podría manejar la tuya a nivel internacional como corresponde?
“Yo espero. El ha tenido un interés. Ahora tiene más tiempo, a pesar de sus responsabilidades. Ahora lo veo más envuelto en el trabajo conmigo”.
Si tu hija Carolina decidiera seguir tus pasos en la canción, ¿cómo la aconsejarías?
“Es poco lo que le tendría que decir, porque ella vive el día a día de mi trabajo, las responsabilidades, los altibajos, lo bueno y lo malo, lo que se ve y lo que no se ve. No tengo que hacer demasiado esfuerzo en explicarle cómo se bate el cobre. Ella no se ve en este camino. Desea ser sicóloga y yo la apoyaré”.
¿Cómo Ednita Nazario desea ser recordada en el futuro?
“Como una buena puertorriqueña que dio lo mejor de sí y que… como una buena boricua (llora) que dio lo mejor que pudo para los suyos y para su patria”.
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