Amarfis:“Los merengueros de calle hemos sostenido el ritmo criollo”

grandes exponentes del género, lo sostienen, uno de esos intérpretes que ha hecho sus aportes al género es Amarfis Aquino, quien en su trayectoria artística nos ha brindado

una amalgama de colores y composiciones, que en su momento deberán ser reconocidas.

“En el año que pasó hicimos muchas cosas buenas para el merengue, entre ellas, sostener el género”, afirma el merenguero que alega que “desde que salió la Coco Band, no ha vuelto la línea romántica de los

años 80” y reitera que lo que el ritmo se ha sostenido en los últimos años gracias al merengue de calle o popular, como se le ha bautizado. Conciente de ello, dijo que trabaja cada día para encontrar nuevos sonidos, sin abandonar ese estilo “urbano”, que acogió hace muchos años y que lo ha llevado a conquistar reconocimientos en el exterior.

Recientemente se dio a conocer su nominación en los premios Billboard en el renglón “Canción de artistas nuevos”. Es la primera vez que está nominado en esta premiación y todo gracias a su tema “Lamento Boliviano”.

Desde hace más de 10 años Amarfis reside en los Estados Unidos, donde tiene una fuerte agenda de presentaciones. “Estamos trabajando mucho, y lo indican las actividades, estamos tocando alrededor de cuatro o cinco bailes semanales, de jueves a domingo”, explicó.

Cuando no está tocando, prefiere dedicarle tiempo a crear nuevas melodías, porque también es arreglista, faceta que le permitió incursionar en la música. Hoy día muchos hablan del trabajo que está haciendo en ese sentido. Luis Días, recientemente elogió sus arreglos, los cuales calificó como modernos e innovadores. Nos cuenta la manera cómo llegó al espectáculo: “Yo llegué a la música por casualidad, porque tenía mucho tiempo disponible en la universidad con la otra carrera que estaba

estudiando y mis amigos me recomendaron tomar una clase en el tiempo libre.

En la universidad me preguntaron que me gustaba y le dije que la música y fue así que inicié mi contacto con este medio”. Luego dice: “Me gustó

tanto que solté la otra carrera y a partir de ahí empecé a hacer mis primeros arreglos”. Su primer arreglo fue un merengue de su autoría llamado “Rompe corazones”.