Adalberto Santiago, vocalista: “Estoy en Chicago y me llamaron como a las 6:30 de la mañana para decírmelo. Pero él se despidió de mí, porque lo soñé la noche antes. Lo ví, se me paran los pelos, y le digo: ‘Contra, Ray, que chévere estás bien de nuevo’ y él me dice: ‘Me dieron tres puyazos, pero estoy bien’ y al rato me llaman para darme la noticia. Me dio un adiós.
Estoy acá con mi esposa, que la operaron de la vesícula, pero voy para Puerto Rico el lunes y el jueves salgo para Panamá. Voy a ver si puedo ir a Nueva York, pues hablé con la viuda.
La última vez que compartimos fue en el concierto de Bellas Artes (septiembre 2005), que de salud estaba bastante bien e hizo un trabajo fantástico.
Desde el 1967 nosotros estuvimos juntos, y de ahí hasta la fecha. Hicimos el disco ‘Reconstruction’, presentaciones de discos en diferentes lugares, grabé con Celia y con Barretto, que fue tremendo trío. Para mí fue un padre musical, aparte de la disciplina que aprendí de él”.
El primer rap fue el tema “El Watusi”de Ray Barretto
Pete Bonet, vocalista: “Estamos bien sentidos… Ray Barretto y yo tenemos mucha historia. Yo soy de la Colectora de la 23, en Santurce. Salí de ahí a los 16 años y medio hacia Nueva York. Desde los 23 (años) estoy trabajando con Ray, viajando a Hollywood, Venezuela, fuimos a África. Allí pasamos un susto con él, por poco se nos muere porque nos estaban trasladando en un jeep y levantaba polvo, que era como barro, y ese polvo entraba al frente de nosotros. A Ray le dio un ataque de asma bien malo y nosotros le dijimos al chofer y paramos en un hospital porque se le había quedado la pompa (para inhalar los medicamentos) en el hotel. De ese día en adelante siempre la llevaba en el bolsillo (ríe). En ese viaje de 12 días, como para 1968, compartimos tarima con James Brown.
Otro susto lo pasamos en Nueva York, pues fuimos a comer y prepararon un caldo con mariscos, pero Ray no lo sabía y era alérgico, se hinchó todo. Compartimos muchas cosas. Estuvimos en tantos teatros de negros americanos… como en el Apollo Theater (Nueva York); donde iban los negros bravos.
Recuerdo la canción ‘El Watusi’ que para mí fue el primer rap que se escuchó, que era más hablado. También nos amanecíamos mucho escribiendo temas y compartiendo. Luego salíamos a jugar billar a las 2:00 de la mañana, pero sin beber… Ray no bebía licor, ni estaba en drogas, lo que bebíamos era Coca Cola.
Si supieras que Barretto trabajó como baterista en la orquesta de Tito Puente. Un día le pidió $5 de aumento, lo que le negaron, y se fue. (Ríe) ¡Quién lo imaginaría!”.
“Le gustaba la inventiva”
Rafy Torres, trombonista: “De verdad que es un día de luto nacional. Los que compartimos con él en tarima sabemos que era un ser humano de unas cualidades bien especiales, bondadoso, humilde, exigente en la tarima, perfeccionista, pero a la vez le gustaba la inventiva de cada cual, nos daba la oportunidad de aportar. Siempre ensayamos pero a él le gustaba ese detalle, dejar espacio al azar para que la creatividad se viera en tarima.
Hace muchos años atrás en la universidad (Universidad de Puerto Rico) lo trajeron para una de esas presentaciones, y a nosotros nos chocó ver el espíritu incansable de Ray, porque antes de tocar tenía que virarse hacia nosotros, los músicos y darse un par de bombazos porque era asmático. Fue de mucha motivación ver a ese hombre seguir haciendo lo que le gustaba hacer”.
“Fue un ejemplo, un baluarte”
Yolanda Rivera, vocalista: “Tuve la oportunidad de celebrar los 75 años con él en el anfiteatro ‘Tito Puente’. Siempre fue un ejemplo, un baluarte. A los 18 años ya era seguidora de ‘El Rey de las Manos Duras’. Lamentamos mucho la muerte de este hermano.
Él nos dio mucho, no sólo a Puerto Rico sino al mundo. Ray no hubiera estado contento de estar en vida y no en vida… Papá Dios hizo lo que tenía que hacer. Era preferible así a estar como él estaba… sufriendo. Se nos están yendo muchos (artistas). A su familia le doy el pésame.
Tuve la oportunidad de grabar con él un tema dedicado a Vieques, hace como tres años, junto con Adalberto Santiago y otros colegas”.
“Marcó un estilo en los años 70 que perdura todavía”
Jimmie Morales, conguero: “Me enteré de la noticia acá, en Venezuela. Ray fue mi modelo a seguir para aprender a tocar congas. Lo conocí personalmente en 1984 en Nueva York, pero soy fanático de él desde los años 70.
Lo recuerdo como uno de los mejores congueros en la música latina… es la representación más grande que hemos tenido en cuanto a percusión. Marcó un estilo en los años 70 que perdura todavía y sé que muchas personas de mi época piensan igual que yo. Él fue bien innovador y siempre estuvo al tanto de los cambios musicales. Hace más de un año coincidimos en Nueva York cuando fui a verlo con su grupo de jazz”.
“Un individuo que le dio prestigio a la música, porque fue limpio”
Willie Rosario, timbalero: “Me siento muy triste por la muerte de mi amigo desde la juventud en New York, donde nos criamos musicalmente. Espero que el Espíritu Santo lo acoja en su seno y le dé vida eterna.
Como persona fue un individuo educado, decente, responsable. Fue un individuo que le dio prestigio a la música, porque fue un individuo limpio y no tenía ninguna clase de vicio. Y como profesional y músico era de mucho talento, creativo y consciente del instrumento que tocaba. Su solo en las congas lo hacía muy bien. Tenía un sonido grande en su instrumento. La aportación musical que ha hecho al concepto de la salsa y al género del mambo fue intensa y muy creativa.
El primer baile que tocó Ray Barretto de música latina yo era el timbalero de esa orquesta. De ahí hicimos una amistad y él vivía en El Bronx. Hacíamos descargas rítmicas en Crotona Park del Bronx, con Manny Oquendo, Joe Quijano, Orlando Marín, Eddie y Charlie Palmieri.
“Callado, humilde, amigo, un gran hombre, no hablaba de nadie…”
Ismael Miranda, vocalista: “Ray y yo estuvimos juntos hace como siete meses en un concierto que hice en Nueva York y él fue a vernos. Teníamos una amistad chévere, fue compañero mío de trabajo con las Estrellas de Fania. Siempre fue calladito, humilde, buen amigo, un gran hombre, nunca hablaba de nadie, además de ser un músico muy talentoso. Conocía latin jazz, música afroantillana, simplemente un conocedor grande de nuestra música.
Lo sentimos mucho, tuve la oportunidad de trabajar con él y me hizo sentir bien cómodo, es una pena que haya pasado a mejor vida. A su familia no la veía mucho, porque él no acostumbraba a llevarlos a los shows”.
“Me impresionó su dinamismo”
Gilberto Santa Rosa, cantante: “Autenticidad, musicalidad y mucha valentía son algunas de las palabras que describen la brillante carrera del maestro Ray Barretto, ése es el gran legado que nos deja.
Tuve la oportunidad de verlo varias veces con excelentes agrupaciones y recuerdo más su carrera como salsero que como músico del latin jazz.
El último espectáculo en que lo vi fue bastante reciente, en el coliseo ‘Rubén Rodríguez’, me impresionó como siempre el dinamismo y vitalidad con que dirigió su orquesta, sin perder el contacto con el público. Mi más sentido pésame a su familia y su fanaticada”, indicó en un parte de prensa.
“Tremendo guerrero en tarima”
Eddie Palmieri, pianista: “Muy triste… es una pérdida muy grande. Él era un tremendo guerrero de la tarima, un tremendo músico que por muchos años presentó grandes orquestas. Estamos acá muy tristes en la familia Palmieri”, manifestó a la agencia de noticias EFE.
“Diamante en la música”
Nicky Marrero, conguero: “Ray Barretto era uno de los diamantes en la música. Él era mi amigo, como un padre, como mi hermano, con mucha sabiduría… siempre era bien cariñoso y eso siempre me lo llevo en el corazón”, dijo a
A celebrar su larga trayectoria
Humberto Ramírez, trompetista: “Es un día muy emocional para mí puesto que me levanté y lo primero que escuché fue que falleció Ray y, pues, estoy un poquito triste, pero a la misma vez contento porque podemos celebrar una larga trayectoria en la música.
Podemos celebrar que una persona tan importante y tan especial como él nos ha dejado un legado tan importante para esta generación y futuras generaciones”, reaccionó a la agencia EFE.
El trompetista tocaba en 1985 con la orquesta de Willie Rosario y narró que “usualmente alternábamos con la orquesta de Ray Barretto en Nueva York, usualmente en el famoso club de baile El Corso”.
“Desde ahí tuve la oportunidad de conocerlo y, posteriormente, tuve la oportunidad de que compartiéramos especialmente en varios eventos… en el 1997 en uno de los principales eventos de Jazz en Estados unidos, que se celebra en Cleveland, Ohio, tuvimos la oportunidad de compartir tarima y tuvimos muy buenas experiencias esa noche”, recordó.
“Él no se imaginaba cuán grande era, admirado y respetado”
Néstor Galán “El Búho”, locutor de Z-93 y animador: “Compartimos en muchas ocasiones, lo entrevisté y lo presenté en sus últimos tres conciertos en Puerto Rico: en el Centro de Bellas Artes, en el coliseo ‘Rubén Rodríguez’ y en el anfiteatro ‘Tito Puente’.
Era una persona que hablaba muy pausado, muy sabio, conocedor, estudioso de la música. Yo siempre trataba de hacerle preguntas de las cuales tenía curiosidad de algunas grabaciones, sobre sus cantantes, y siempre estaba dispuesto a contestar. Era muy sencillo.
Desde niño lo admiraba, fue un honor conocerlo. Perderlo físicamente es un dolor muy grande, porque era único… era un gran compositor, músico extraordinario, virtuoso, cantante. Fue talentoso dentro del jazz, como en su integración con la salsa, siempre tuvo éxito con todo lo que hacía.
Sólo puedo decir cosas lindas. Él no se imaginaba cuán grande era, admirado y respetado en todo el mundo. Siempre estuvo dispuesto a darle oportunidad a la nueva generación, lo que demostró en sus presentaciones en Puerto Rico”.
Su parte en la historia salsera habrá que escribirla en oro
Pedro Arroyo, director de programación de Z-93: “A Barretto lo conocí allá por los años 72 o 73, pero vine a ser un poquito más cercano con él cuando trabajé en la fábrica de discos Fania, cuando era en Canóvanas. Yo corría el departamento de imprenta, ahí fue que empecé a conocerlo. También, fui vecino de Cheo Feliciano por más de 15 años y a traves de él conocí a éstas grandes figuras. Luego, cuando me inicié en la emisora (1983) fuimos más unidos, por encima del trabajo. Hubo una amistad bien genuina, de ambas partes. Fue un excelente músico, excelente percusionista.
Barretto nos deja un legado sumamente grande… su resumé de éxitos es enorme y por su orquesta pasaron cantantes como Rubén Blades, Tito Allen, Ray Sabá, Adalberto Santiago, llegó a grabar con Celia (Cruz) y viajó el mundo con las Estrellas de Fania y con su jazz. Se habrá ido físicamente, pero su música va a perdurar y espero que lo haga.
Hablamos el día antes de su primera operación de corazón y me pidió encarecidamente que al otro día en la emisora oraran por él, pues ‘si me quitan mi música, me muero’. Hemos tenido una programación especial con la música de Barretto, con reacciones de sus colegas, y seguiremos así hasta que le den cristiana sepultura.
Llevo más de ocho años cabildeando y luchando para que en este país se apruebe un proyecto escolar para que se enseñe música popular puertorriqueña, sus cantantes, sus arreglistas, los compositores… Que se enseñe que hubo figuras como Ray Barretto, Tito Puente, Charlie Palmieri, Pete ‘El Conde’ Rodríguez. Esto será una herramienta contra la deserción escolar y, además, vamos a enseñar a los muchachos que van subiendo que si hoy en día existen cantantes como Jerry Rivera o Víctor Manuelle, etcétera, se le debe a esa zapata fuerte de las grandes figuras que la hicieron para levantar el género que hoy conocemos como salsa. Cuando se escriba en las páginas de la historia, el nombre de Ray Barretto habrá que hacerlo con letras en oro y más grandes que él”.
“No dejó cosas a medias porque todo lo hacía de corazón”
Robert Padilla, coleccionista: “Yo como coleccionista, es una de las colecciones más importantes. La tengo completa, inclusive me refiero a cuando empezó en la charanga, la salsa y el latin jazz. Todo lo que hizo lo hizo bien, completo. No dejó cosas a medias porque lo hacía de corazón. Se preocupó por los arreglos, el sonido, la calidad del sonido. Hay músicos que graban por grabar.
Su aportación mayor es que de la mayoría de todos los mejores congueros que tenemos a nivel mundial, él es su influencia. Era buen comerciante y buen músico.
“Ray Barreto tenía una facilidad para hablar. Hay muchos músicos que son virtuosos en lo que hacen pero no saben expresarse. Yo me asombré en unos ensayos. Me acuerdo que un día había un poco de fricción y el paró el ensayo… a veces pasan esas cosas cuando hay muchas estrellas juntas… me acuerdo que les dijo: ‘Creen, inventen’. Me impactó. Estaban dejándose llevar por los papeles, que tenían unos errores estúpidos, y él les decía que esto es música, que se dejarán llevar por la experiencia”.
“Humildad, amor y verticalidad”
Aníbal Acevedo Vilá, gobernador: “Con gran pesar recibimos la triste noticia del fallecimiento de nuestro Ray Barreto, ‘El Rey de las Manos Duras’. ‘El Maestro del Jazz’, como recientemente fue distinguido. Nos deja un gran legado de su música, humildad, amor y verticalidad que debe ser emulado para que sirva de inspiración para beneficio de futuras generaciones.
Damos gracias a Dios por la oportunidad que nos brindó de su música, de la alegría que caracterizó toda su vida. Nos unimos en oración deseando que Ray esté descansando en la Casa del Señor”, dijo en comunicación escrita.
“Quedará inmortalizado…”
Kenneth McClintock-Hernández, presidente senatorial: “Lamentamos la pérdida de Ray Barretto, quien con su prominente y respetada carrera artística, supo colocar el nombre de todos los puertorriqueños, los nacidos en la Isla y los que no, muy en alto. En el Senado de Puerto Rico reconocemos la aportación de este virtuoso de la música en sus diversos géneros, que quedará inmortalizado por el cariño y la admiración de todo un pueblo”, manifestó en una misiva.
“Representó la energía creativa de una generación de boricuas”
José Luis Vega, director ejecutivo del ICP: “Nos unimos al pesar de la familia de Ray Barretto y al luto que embarga al pueblo puertorriqueño por tan sensible pérdida. El maestro Barretto representó la energía creativa de toda una generación de puertorriqueños que en su vertiente musical sentaron pautas que continúan vigentes en el presente”, expresó por escrito.
© CARACOL S.A. Todos los derechos reservados.
CARACOL S.A. realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados.