Lími-T 21 convierte el coliseo en pista de baile

Tota

Todo quinceañero moderno tiene emoción, lágrimas, inesperados reencuentros, reggaetón y mucho merengue, por eso el concierto de la agrupación Lími-T 21 no podía ser distinto.

Con esto en mente, elementos variados nutrieron el espectáculo “15 años… la historia”, que se llevó a cabo el sábado en el coliseo “Roberto Clemente” de San Juan.

El festejo de sus 15 años de trayectoria auguraba sorpresas, pues durante la apertura del show, el trío descendió del techo del coliseo simulando bajar de un helicóptero. Así dieron paso a rítmicos merengues e intensas coreografías.

“Como ustedes pueden ver el diseñador del vestuario era un desastre y el estilista de peinado, y el coreógrafo era cojo”, dijo en tono de broma el animador Luisito Vigoreaux, quien presentó una secuencia de vídeos que resumían las diferentes etapas de Lími-T 21.

Estas imágenes sirvieron de antesala a la vocalización de éxitos de la década de 1990, con los que hicieron revivir los años dorados del merengue, entre los que se encontraban “Me faltas tú”, “Eres mi chica”, “Tengo una pena”, “Ya te vi” y “Cuando llega el amor”.

Para darle actualidad a su repertorio interpretaron temas de su nuevo disco “Rankeao” en el que traen una fusión innovadora llamada merenguetón. Por eso, el uso de frases y palabras comúnmente usadas por los reguetoneros, resaltaban en sus líricas.

Pero como ningún concierto en Puerto Rico puede quedarse ahora sin la participación de algún exponente de este género, los raperos Yaga & Mackie les ayudaron a “rapear”, a pesar de que no aparecieron en el proscenio cuando se les anunció, sino dos canciones más tarde. El dúo acompañó a la orquesta en la versión remix de “Baile pegao”.

Otros que le inyectaron reggaetón a la presentación fueron Angel & Khriz, quienes lograron mayor integración que sus antecesores con el grupo de merengue, con la canción “Ven báilalo”.

Ramiro Matos, Javier Bermúdez y Elvin Torres demostraron su versatilidad, no sólo con sus rapeos y sus bailes de “perreo”, sino que se pusieron románticos con una compilación de baladas que incluían “Yo no me quiero enamorar de ti”, “Me acordaré” y “Gracias”.

Elvin ocupó entonces el piano y un cuarteto de músicos de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico le acompañó en los violines.

Esta singular interpretación dejó una puerta abierta, pues si las cosas les van mal en el merengue podrían lanzarse como baladistas, ya que la armonía de sus voces recibió la aceptación de la audiencia.

Músicos en los tambores trajeron también el ritmo de la bomba en “Amanecer”, y el grupo Revolucada puso el sonido de la batucada en “Que lo baile”.

La energía de temas más recientes, como “Estás enamorada”, “Arranca en fa”, “Aguántalo ahí”, junto a los sensuales movimientos de cintura de los muchachos, causaron furor e hicieron que el recinto se convirtiera en una enorme pista de baile.

Los merengueros se emocionaron y estuvieron a punto de llorar cuando todas las voces del coliseo se unieron para entonar “Yo te seguiré queriendo”.

Pese a que hubo algunos baches, la producción, que estuvo a cargo de José “Pompi” Vallejo y Xtreme Management, estuvo cargada de sorpresas.

“A lo Manía, a lo Lími-T 21”

Puede que los fanáticos del merengue hayan disfrutado de la música de Grupomanía y Limi-T 21, pero jamás en un mismo escenario como se les vio durante el concierto.

Esto resultó ser una agradable sorpresa para los asistentes y para aquellos que creían en la rivalidad de ambas agrupaciones.

Grupomanía y Lími-T 21 formaron un junte explosivo con su tema inédito “A lo manía, a lo Limi-T”, que hablaba de los orígenes y la trayectoria de los conjuntos.

Los que no pudieron presenciar este energético encuentro podrán escucharlos en una canción de los chicos de Limi-T 21, que ya grabaron con sus homólogos.