Silvio Rodriguez en el Auditorio Nacional de Mexico

El cantautor cubano, el trovador, el siempre poeta Silvio Rodríguez encantó a los 10 mil asistentes al primero de sus dos conciertos que dará en el Auditorio Nacional. Con un escenario austero con impactos rojos, el cantante salió al escenario luciendo un atuendo negro en el que resaltaban sus zapatos color vino que hacían contraste con el amarillo de su guitarra acústica que siempre lo acompaña.

Los acordes de Papalote permitieron al público evocar amores y recuerdos perdidos, mientras el cantautor dejaba que su guitarra se elevara al cielo.

La canción En el claro de la luna se escuchó y sus seguidores lo ovacionaron, mientras en las dos pantallas se mostraba un Silvio feliz, quien soltaba alguna que otra risa cuando la gente le pedía alguna canción.

Acompañado de un bajo, dos guitarras, una flauta y batería, Silvio cantó grandes éxitos. Entre los más coreados se contaron De la ausencia y de ti y Quién fuera. El público en su mayoría eran adultos, pero había uno que otro joven hippie que se tocaba el corazón cuando el cubano dirigía algunas palabras de protesta y recordaba la época revolucionaria.

Después vinieron Canción del trovador errante y Judith, pero una ovación de más de dos minutos le dieron cuando terminó de interpretar la canción Unicornio, que fue coreada por todas las gargantas que se encontraban en el recinto.

El cubano dio las gracias y salió del escenario, mientras la gente se ponía de pie y ovacionaba al cantante. Además le gritaba: “Gracias, Silvio”, “No te vayas”. Para complacer al público el intérprete salió o cantó Ojalá, que en México es un himno de amor y dolor.

Dejó por segunda ocasión el escenario y la gente se empezó a salir del Auditorio, cuando escuchó un acorde más y los que se habían marchado regresaron para oír La maza, que puso a zapatear a los que se encontraban en los pasillos del recinto.

Regresó por tercera vez y también por cuarta ocasión para decir: “¿Me dejan decir algo?: vamos a hacer una más, ésta es la primera canción que escuché en mi vida y se las voy a cantar a ustedes”, y así dio por terminado el concierto con la canción El colibrí. Satisfechos, sus seguidores aplaudieron por más de tres minutos mientras abandonaban el lugar.