Tito Rojas rescata su “línea sensual”

Tota

Los miembros de la especie Gallus gallus, nombre científico del gallo rojo, cantan hasta la muerte para marcar su territorio. Y, mientras más fuerte lo hagan, más seguro es que el gallinero siga respetándolos y las gallinas continúen rindiéndose a sus pies.

He ahí la razón por la que Tito Rojas sigue comportándose como un “Gallo Salsero”, el apodo al que se apega porque, dice, lo identifica mejor.

Con 35 años de trayectoria y 22 producciones discográficas, acaba de lanzar al mercado dos álbumes de manera simultánea “para cantar más fuerte”, ambos con el propósito de recuperar su “línea sensual” y “aplaudir a las mujeres”.

“La estrategia de sacar los dos a la vez es que seguimos trabajando. Yo no voy pa’ trás ni para descansar”, insiste la voz principal de “Sin comentarios” y “Tito Rojas: Éxitos y algo más”, sus dos proyectos en promoción.

Ve parte de la entrevista con el salsero

Los cedés destacan la faceta romántica de Tito sin perder la esencia de los arreglos de Julio “Gunda” Merced.

“En los dos discos le canto bonito a la mujer. Quise recuperar eso, aunque con letras no tan eróticas”, expresa sobre las producciones que propulsará a la vez la semana que viene en Estados Unidos.

Esa simultaneidad le permite al cantante evaluar el pasado y concluir, con aire de melancolía, que “nunca se va a poder llegar a la sensación que causaron esos éxitos como ‘Sensual’, pero lo importante es que nos mantenemos”.

En ese sentido, la posibilidad de reinventarse no existe para Tito Rojas. ¿Ganar público nuevo? Sí le interesa, dice, pero en la tarea de apelar a las nuevas generaciones no tiene que esforzarse mucho porque en eso lo ayudan constantemente los fanáticos que lo han seguido desde sus comienzos.

“Siempre vienen y me dicen: ‘Oye, Tito, ¿no tienes refranes nuevos?’ Pero para qué, si con ‘Perdona, sae’ y ‘Claro, bruto’ y todos ésos ya tenemos”, exclama.

A diferencia de otros sellos disqueros que regraban los éxitos con nuevos arreglos como arma contra la piratería, Musical Productions, asimismo, extrajo los temas más populares de los productos originales.

“Los hijos de los que me conocen, que son los bailadores de la mata, también me conocen y me apoyan”, insiste al aceptar que su sustento proviene más de sus giras internacionales que de su trabajo o ventas de discos en Puerto Rico.

Protege a sus “pollitas”

El salsero asegura estar “todo el tiempo pendiente” a sus hijas Kisha, de quien tiene a sus “adorados nietos” Julián Yadiel (5) y Amanda Isabel (2); y Jessica, de quien ganó a un “rebuscado” yerno.

Y es que, cuenta, ha tenido que estar “buscando como una aguja” a Raúl Armando del Valle, miembro del grupo merenguero Karís y esposo de su hija menor.

“Pero todos estamos bien. Nos llevamos muy bien. Claro, a él le pasa como a mí, que cuando me peleaba (con sus parejas), los suegros me ponían en mi sitio. Le digo: ‘Estás caliente en casa’”, comenta sonriendo.

“Ahora soy ‘El Gallo Culeco’”, añadió sobre la recuperación del aparatoso accidente que sufrió en octubre de 2006, mientras se enredó con sus piernas jugando baloncesto. Al artista le reconstruyeron su pierna izquierda con nueve tornillos.

Ya camina un poco más rápido, todavía no puede correr, pero eso no importa, señala, porque a un gallo rojo sólo le basta con cantar para ser feliz.