Esta convención salsera que se realiza tradicionalmente cada tercer domingo de marzo ya se ha cuajado, aunque algo tardía.
El programador explicó que la cartelera de este año será una estelar, por tratarse del 25 aniversario. La fecha, sin embargo, llega más tarde que en años anteriores por coincidir con la Semana Santa.
El domingo 30 de marzo, desde el mediodía, el estadio Hiram Bithorn de San Juan recibirá a los salseros de corazón para arrancar con la esperada actividad que este año será dedicada a Larry Harlow, Manny Oquendo, director del Conjunto Libre, y al famoso promotor Rafael Viera.
“La salsa nunca decaerá. Siempre voy a recordar que en uno de los muchos maravillosos eventos que hemos tenido, se presentó Roberto Roena y su Apollo Sound, y tocaron ‘Mi desengaño’, que fue un éxito en el 76. Y, ese día, 27 años después, vi a jóvenes de 17 y 18 años cantando los coros, los soneos, todo según estaba en el disco”, recordó el programador.
Para celebrar este aniversario de plata, Pedro Arroyo, junto con locutor Néstor Galán “El Búho Loco”, han armado una cartelera de buena música, la que también desean dedicar al “pueblo salsero que es nuestra razón de ser”.
En tarima estarán la Spanish Harlem Orchestra, la Sonora Ponceña, El Gran Combo de Puerto Rico, Manny Oquendo con sus cantantes Herman Oliveras, Frankie Vázquez, Tempo Alomar y Pupy “Cantor” Torres, además de la Orquesta Siglo XXI, representando a la nueva cepa.
La selección musical, al igual que el año pasado, se realizó mediante las peticiones del público por correo electrónico.
“El público sabe que un Día Nacional es un espectáculo de calidad, cada edición es mejor. Y cada año se nos hace más difícil (la selección de músicos) porque muchos de los grandes maestros han fallecido”, comentó por su parte Néstor Galán.
Un poco de historia
El “Día Nacional de la Salsa” inició en 1984 y fue dedicado a Ismael Rivera. Pedro Arroyo recuerda con asombrante precisión que el querido salsero tenía problemas con sus cuerdas vocales y no podía hablar cuando subió a la tarima. “El aplauso del público todavía dura”, aseguró.
De 1985, cuando fue dedicado al director del Gran Combo de puerto Rico, Rafael Ithier, se acuerda de la majestuosa intervención en tarima de Arturo Sandoval. “Pasó de Plutón con esas notas que tiró”, dijo del trompetista.
En 1987, recordó con tristeza, fue dedicado a Héctor Lavoe, justo cuando el músico comenzaba a vivir su periodo más turbulento.
“Logramos traer a su papá hasta acá para que lo viera cantar, y ese encuentro, ¡diablo! A las dos semanas, su papá muere. Después muere su hijo. Días antes de venir, se había quemado su casa y se había tenido que tirar desde un segundo piso y estaba enyesado de la cintura para abajo. Cantó sentado y tú sabes cómo el público lo recibió”, contó orgulloso.
En 1993 se celebró el décimo aniversario de este congreso salsero y se invitó a todos los que habían estado en cartelera a excepción de Ismael Rivera, que ya había fallecido, y Héctor Lavoe, que se encontraba mal de salud.
En 2002, la Policía calculó la mayor asistencia con 50 mil almas reunidas en el estadio Hiram Bithorn, de San Juan 6.
A Pedro Arroyo no le extrañó el número, pues el evento era dedicado a Rubén Blades, hijo adoptivo del pueblo puertorriqueño.
“Este año, de más de mil sugerencias que me llegaron, mil quinientas pedían a Rubén Blades. Pero hasta que concluya su término como Ministro de Turismo de Panamá, Rubén no va a tocar nada de lo artístico”, aseguró.
Lo que sí espera es el apoyo acostumbrado de los amantes de los ritmos populares, que asisten cada año, independientemente la cartelera que se ofrezca.
Haz que tu comentario
sea el primero
© CARACOL S.A. Todos los derechos reservados.
CARACOL S.A. realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados.
