
Ella le explicó a Diva Jessurum: “Yo miré el onceavo piso de donde vivía, y me asomé y dije ‘no quiero vivir más’; yo le pedí a Dios que me llevara“. En esa época ella sentía un gran vacío en su vida.
Su gran dolor era la soledad y aunque contó con el apoyo de sus amigos Heriberto Sandoval y Marcelino Rodríguez, conocido como Mandíbula, siempre se sintió sola.
Silva contó: “[Estaba] llena de contratos, con mi billetera ‘popocha’ y yo, en la soledad más grande de mi vida“. Luego se hizo un procedimiento cosmético con el que quiso “parar” su busto pero le aumentó y empezó a sufrir de la tiroides, lo que empeoró la situación.
Se dice de mi..caracol tv.. #exelente #exo #e
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