LOS ANGELES – El merengue fue el gran ausente de la estupenda oferta musical ofrecida en el espectáculo que antenoche sirvió de marco para la primera entrega de los premios Grammy Latinos.
La mayoría de los ritmos latinos con trascendencia internacional se dejaron sentir a lo largo de las dos horas del show, pero ningún merenguero dominicano o puertorriqueño subió a colocarle sazón criollo al sabroso menú.
El mismo Juan Luis Guerra lo notó a los pocos minutos de montarse en la limosina que lo transportaba. «Para el año que viene deben colocar merengue en el Grammy, aunque la selección musical estuvo maravillosa, fue muy buena, pero faltó el merengue porque hubo cumbia, salsa, pop, rock…».
En ese sentido, pidió «que incluyan merengue, es necesario, pero eso escapa a todo lo que nosotros podamos hacer».
La velada musical fue un mosaico de la música generada en Latinoamérica o interpretada por artistas de origen hispano.
Una super banda, en la que figuraba el dominicano Michael Camilo, abrió con un homenaje a Tito Puente en el que la parte vocal estuvo protagonizada por Ricky Martin y Celia.
Oye como va resonó en el Staples Center como queriendo revivir al fenecido timbalero fallecido a principios de año. Se reconocía así la trayectoria de un legendario músico que fue símbolo de la cultura latina.
Gloria Estefan también tuvo un acento muy tropical, al igual que el colombiano Carlos Vives con su vallenato Fruta fresca, tema que puso casi a bailar a los asistentes.
Además de esa descarga salsera, el rock tuvo una motivante presencia teniendo en el centro a Maná y Carlos Santana interpretando Corazón espinado.
Uno de los momentos más llamativos y que se salía del área latinoamericana para trasladarse a la hispana original fue cuando Tomatito subió a escena con flamenco.
El pop, en cambio, estuvo muy bien representado por Shakira y Christina Aguilera. NSync y Son By Four, Alejandro Fernández fueron otros artistas con exposición de ritmos suaves.
Los artistas y los ritmos que lo sustentan fueron protagonistas importantes de esta jornada y porque le salió todo tan bien que es lamentable que el merengue se haya quedado fuera.
«Vamos a esperar que el próximo año nuestro ritmo esté presente, vamos a trabajar todos para lograr eso», concluyó diciendo Juan Luis cuando se refirió a la ausencia del ritmo criollo en el show artístico.
Los organizadores del Grammy bien pudieron aprovechar la disposición de Juan Luis de asistir siempre a las premiaciones importantes y juntarlo con Elvis Crespo, Olga Tañón, Hermanos Rosario y otros nominados en el renglón merenguero.
