La actuación de los Hermanos Rosario, que fue la penúltima de la noche, daba la impresión de que vengaría la derrota que Elvis Crespo le aplicó en Altos de Chavón a Fernandito Villalona. Sin embargo, no fue así, ya que el boricua que actuaba por primera vez ante el público de Santiago y el Cibao “se robó el show”.
Con Crespo la euforia de la juventud de ambos sexos era incontenible y en ocasiones la seguridad casi pierde el control de la multitud que quería acercarse al escenario “aunque fuera una pulgada”. El merenguero boricua actuó acompañado de cuatro bailarinas en algunos de sus temas y el acompañamiento lució magnífico. En varias ocasiones habló para agradecer el respaldo que siempre le ha dado el pueblo dominicano. Los Rosario, como era de esperarse, emocionaron con sus pegajosos temas a la concurrencia que, aunque apretujada, no cesaba de bailar al ritmo de “Los Hermanos Bomba”.
Mientras, Sergio Vargas interpretó sus temas más populares, entre ellos de décadas pasadas y que fueron verdaderos éxitos en el mercado discográfico
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