Elvis Crespo con el Miami City Ballet

Tota

A primera vista, parece algo insólito. Algo que provoca decir, y por qué no, ¡wow, flash! El Miami City Ballet (MCB) celebra este viernes 2 de febrero su décimoquinto aniversario con una gran fiesta en la que el artista estrella será «Mr. Suavemente», Elvis Crespo.

En asociación con el hotel Ritz-Carlton, South Beach (aún en construcción, y pautado para abrir en septiembre de este año), patrocinador del evento, el Miami City Ballet celebra los 15 años del cuerpo de bailarines con el debut de la compañía del ballet de George Balanchine, «Slaughter on Tenth Avenue», al ritmo de la música de la famosa comedia musical de Richard Rogers On Your Toes.

El repertorio artístico de la noche (la función comenzará a las 7:00 p.m.), incluirá también presentaciones de las Variaciones de Donizetti, Tarantella y el Pas de Deux de Don Quijote, por Petipa.

A esto seguirá una cena/baile de etiqueta, el «Stargazer Ball», que se efectuará bajo una carpa donde ahora se construye el nuevo Ritz-Carlton. Y será ahí que el boricua Crespo pondrá a miembros, auspiciadores y amantes del ballet a bailar al son de los ritmos tropicales, y no precisamente en zapatillas.

«El Miami City Ballet siempre ha buscado la forma de atraer al público hispano, y cuando me pidieron que los ayudara a organizar la gala, pensé que no había mejor forma de celebrar que con un artista de los nuestros», recuerda Dayssi Olarte de Kanavos, esposa de Paul C. Kanavos, dueño del Ritz-Carlton, South Beach, y quien ha coordinado los esfuerzos de la gala.

«Les pregunté a mis amigas latinoamericanas que quién tenía la mejor música para bailar en una fiesta, y todas coincidimos en Elvis. A Paul mi esposo también le gusta, por lo que nos comunicamos con su «management» para contratarlo», dice entusiasmada Olarte de Kanavos, oriunda de Colombia. «Tanto Elvis como el Miami City Ballet y el Ritz-Carlton son estrellas en ascenso».

Crespo está pautado para amenizar el baile en tres «sets», junto a una orquesta de 22 músicos. Habrá además un DJ de Nueva York, Tom Finn, que ha tocado en fiestas privadas de celebridades como Billy Joel, Whitney Houston y Oprah Winfrey.

Curiosamente, y quizás a manera de presagio sobre la relación entre Crespo y el ballet, el artista figuró en algunas escenas de una película exhibida el año pasado, Center Stage, que trataba sobre un grupo de jóvenes aspirantes a la más prestigiosa escuela de ballet de Estados Unidos. Una noche, los chicos deciden liberar sus tensiones en un club de música tropical, y lo hacen con la música de Crespo, quien aparece en pantalla al fondo.