Jennifer Lopez

Tota

Jennifer López sabe exactamente lo que sus fanáticos quieren y ella se los obsequia aún más en su segundo álbum titulado «J Lo».

En realidad, según Jennifer, ella tomó la idea del título de este álbum como un tributo a sus fanáticos por aclamar «Hey, J Lo» cuando la misma hace sus apariciones públicas. Las Divas de música bailable (Dance Music), no necesariamente necesitan el talento vocal a comparación a las estrellas de R&B, y López entra exactamente a su rango en este álbum con los ritmos de ranuras bailables, con canciones seductivas y con lo que llamo un «Pop Latinesco.» Vamos a llamarlo Platin, como un homenaje al pleather (leather falso) y al número de discos que este álbum va a vender.

En ese rango, la simplicidad de las líricas de las canciones las hacen ideales para sus fanáticos-estas canciones pueden atribuirse fácilmente para expresar sentimientos comunes tales como el final de una relación, una reconciliación y hacer el amor. El álbum es definitivamente bailable y tiene mucha probabilidad de tener varios «hits» que figuren entre los más destacados de música bailable en las tablas de popularidad. Mi canción favorita es «We Gotta Talk» (Tenemos que hablar).

Varios productores de nombres conocidos (Corey Rooney, Puff Daddy) trabajaron en equipo para la realización de este álbum y al igual que en «On the Six» la producción es hábil. En esta ocasión su compañero de duo es nada más y nada menos que la sensación del pop «Chayanne», que con su fácil forma de cantar resulta la combinación perfecta para Jennifer.

Ahora, yo sé que si ustedes leen la crítica que yo escribí acerca del álbum de Oscar de la Hoya, van a decir «¡Un momento, que hipócrita! ¿Por qué atacó tanto a Oscar y alaba tanto a Jennifer…acaso no es lo mismo?» La respuesta es: no, no es lo mismo. La diferencia entre los dos discos es que J Lo es acerca de pop/dance (música bailable) y dentro de ese género uno puede dejar pasar el hecho de no ser un gran cantante, en siendo que rescates las ranuras correctas…todo depende de ¿Puedes bailar ese ritmo?». Madonna y Paula Abdul son dos ejemplos perfectos de este principio. En cambio Oscar intenta cantar varias baladas cuando todavía no esta listo para ese reto.

En su crítica yo destaqué que si continua entrenando y trabajando fuertemente, a lo mejor en el futuro tendrá lo que toma cantar estas baladas. – Little Judy (traducción por Amalia Gomez) .

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