Willy Chirino: La frescura del sonido propio

Con esa frase comienza Verano, el primer sencillo del nuevo disco del sonero cubano Willy Chirino, Afro-Disiac, un álbum de madurez donde el artista pinareño nos presentar el son del futuro.

“Es el disco número 20 de mi carrera y, desde varios puntos de vista, marca un cambio profesional´´, nos dice el Tipo Típico y confirma: “Es mi primer disco desde que Lissette y yo tomamos las riendas de nuestras carreras y fundamos Latinum Music (www.latinumusic.com), y es la primera vez que hago un álbum con 14 canciones todas mías´´.

Yo me paso todo el día trabajando/ No duermo la mañana/ Ni de vez en cuando/ Llevo el pan cada noche pa´ mi casa/ Hago dieta, como lo que adelgaza, sigue cantando en I Wanna Dance, el segundo corte del CD.
“En esta oportunidad he trabajado con todo el tiempo, sin medir las horas, pues lo hice en mi estudio, disfrutando las ventajas de la digitalización y las facilidades que da la tecnólogía´´, confiesa.

Eso se percibe en el extraordinario resultado obtenido en la grabación, donde los planos sonoros se alternan y las voces se funden en coros con sonoridades novedosas, que aportan frecura al son, la plena o el merengue, sin perder el estilo carcaterístico de Chirino.

“Eso me da una gran satisfacción, que se sienta la línea de trabajo que he mantenido y que he venido desarrollando, mi sonido propio. Es que uno tiene que estar al día. Mira, yo me inspiro mucho con los muchachos, con mis hijos y sus amigos. Me fijo mucho en lo que les gusta escuchar, en el sonido que buscan para bailar´´, y se nota.

En esta producción –que ya está a la venta– Chirino no se limita sólo a estar al día. Con el uso de efectos cercanos al tecno y el rock más actual, y sin perder la esencia rítmica de los géneros del Caribe, nos presenta un producto que marca el futuro de la música bailable latina.
Sube más el volumen, dame percusión/ Yo quiero música, yo quiero acción/ Y prefiero gozar moviendo el esqueleto/ No me puedo quedar quieto.

Ser productor y dueño de su proyecto le permitió trabajar en maquetas para cada canción y volver una y otra vez sobre las grabaciones hasta lograr el sonido planeado. Tener la idea de un concepto concreto, lo ayudó a conseguir unidad de estilo, en un álbum variado donde se alternan diferentes ritmos.

“Esa es una de las grandes ventajas que tiene trabajar para ti y poder aplicar toda la experiencia, sin limitaciones, sin tener la preocupación del costo por tiempo de estudio. En cuanto a la unidad, yo se la doy siempre con la tónica bailable de mi música. Yo hago música bailable´´.
Cuando yo la vi con su escote abierto/ No me lo podía creer/ Es de esas mujeres que revive a un muerto/ Y te puede enloquecer, describe la letra del tercer corte Trepando paredes, con el que da inicio a un tríptico sobre el hombre frustrado, en el cual se percibe el aire de otro de los éxitos de Chirino.

“Sí, uno parte de los aciertos, aquí está Tú eres mejor, que se desarrolla de forma parecida a Tu cumpleaños, de Cómo será. Hay que aprender que hay ciertos patrones a seguir que van a tener más oportunidad de éxito´´.
“El propósito de un artista es la creación y si estás trabajando con un género musical, enterado de lo que está pasando, tienes que crear cosas nuevas. En mi forma de ver, uno tiene que aportar algo distinto a la música´´, criterio que no se circunscribe al sonido, a la elaboración musical y a la fusión de tendencias novedosas, sino también a las temáticas de las canciones.

Mira lo que me pasó/ Coro: (ese me mordió)/ El candidato solicitó mi voto y después se corrompió/ (ese perro también me mordió)/ El que me vendió ese carro que nunca caminó/ (ese me mordió)/ Aquel que me pidió dinero pero nunca me pagó/ (ese perro también me mordió)/ Y el que le fajó a mi novia y después se la llevó/ (ese me mordió)/ Y a la que le pagué seis tragos y entonces desapareció…

“Lo más importante que yo hago en mi vida, es un disco. Puedo hacer un concierto y lo hago con gusto y pongo toda mi energía, pero es en un disco donde tengo presente que queda para siempre. Mira, yo tengo esos discos de Miguelito Cuní, Roberto Faz, naturalmente, Beny Moré, gente que grabaron en los años 40 y en los 50 y uno aprende de ellos y ve lo adelantados que estaban. Yo espero que de aquí a 50 años un muchacho escuche algo que yo estoy haciendo ahora y diga `el tipo este estaba ca…, mira lo que hacía en esa época´ y pueda aprender algo de lo que uno hace´´.