“Ambos han dedicado su sentimiento y talento para brindarle a nuestra gente y al mundo, sus composiciones e interpretaciones. Son ingenio y voz del alma de nuestro pueblo”, señaló el presidente senatorial Antonio Fas Alzamora.
Tite y Moneró recibieron copias de las resoluciones suscritas por el legislador Orlando Parga. Con su peculiar humildad, Tite dijo: “me siento encantado porque son cosas que no busco pero que tampoco rechazo”.
El reconocimiento senatorial ocurre un mes después del homenaje en Radio Universidad, emisora que le asignó su nombre a su moderno estudio de grabación digital.
Tite, de 76 años y cuya salud está un poco quebrantada, es el compositor más representativo de la salsa. Al impacto que sus canciones ejercieron en la expresión se atribuye, en parte, el rotundo éxito del Día Nacional.
“El pueblo está buscando una salida. La gente está envuelta en pugnas políticas y la salsa libera su espíritu de sus presiones y les da un desahogo”, expresó Tite, quien pronto concluirá la producción del álbum de poesía negrista De Palés a Curet Alonso.
Por su parte, José Luis Moneró aceptó con regocijo el homenaje y, en un aparte con El Nuevo Día, dijo que lo esperó durante 64 años.
“Es un sueño que se hace realidad. Comencé a cantar en El Escambrón y cuando salía temprano pasaba frente al Capitolio cuando caminaba al Viejo San Juan. Yo le decía a mis músicos que un día me iban a llamar del Capitolio. Y ocurrió 64 años después”.
Moneró, el ex cantante de la Orquesta de Rafael Muñoz, cumplirá 81 años el 6 de abril. Hoy celebrará 38 años de sobriedad en la Universidad del Sagrado Corazón.
“Si no hubiese parado de beber, estaría muerto. Mi garganta se conserva en buenas condiciones porque Dios me liberó del alcoholismo”.
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