A las 9:05 p.m., las 246 luces movibles se encendieron para iluminar la enorme tarima de cuyo centro emergió Ricky, al ritmo de ‘Pégate’.
Con una estilo urbano, acorde con el enérgico número que abrió el show, Ricky encendió los ánimos del público que no paró de bailar, cantar y aplaudirlo. Siguió con ‘This Is Good’, ‘Jaleo’, ‘I Don’t Care (Qué más da)’ y ‘María’, en inglés y español.
Además de tan impactante despliegue de tecnología de producción, el boricua Ricky Martin demostró ser un artista integral por su calidad interpretativa y destreza para el baile, sea capoeira (danza brasileña) o un insinuante movimiento de caderas.
De la emoción pasó a la intimidad con ‘Vuelve’, ‘Gracias por pensar en mí’, ‘Fuego de noche, nieve de día’ y ‘Todo queda en nada’, fueron interpretadas tal como en el disco “Ricky Martin Unplugged”.
La euforia de los asistentes se avivó al verlo nuevamente y escucharlo decir: “Tenemos una hora y media para ser felices. ¿Se puede ser feliz en Caracas?”. ‘Revolución’, ‘It’s Alright (Déjate llevar)’, ‘Livin’ la vida loca’ serían los siguientes temas.
Ricky no sólo evidenció su crecimiento profesional, sino espiritual e intelectual en las tres ocasiones que se dirigió a la audiencia.
“¿Caracas cómo la están pasando? Quiero que se oiga hasta en Puerto Rico. Yo la estoy pasando muy bien en Caracas, en mi vida, en general. Es un momento muy mágico. Estoy muy agradecido. Me estoy enfocando en lo que tengo, porque si me enfoco en lo que no tengo me vuelvo loco. Tengo salud, familia y, sobre todo, tengo fe, mucha fe y más fe”.
Habló de los problemas que aquejan al mundo actualmente y de nuestro compromiso por hacer algo al respecto. “¿Qué puedo hacer como ser humano contra esto?”, preguntó. “Nosotros somos la semilla del cambio”, acotó antes de entonar el tema ‘Somos la semilla’. Más tarde cantaría ‘Asignatura pendiente’ y ‘Drop it on Me’.
‘La bomba’ y ‘La Copa de la vida’ marcaban el falso final del concierto que estuvo a cargo de Chris Lamb, en la gerencia de producción, el mismo que trabajó para Madonna en “Tour Confessions”. Los directores creativos, Jaime King y Dagoberto González también han trabajado con la reina del pop. De ahí las similitudes del show de Ricky con el de la cantante estadounidense.
‘Tal vez’ y ‘Tu recuerdo’ –sin La Mari de Chambao en esta ocasión- cerraron lo que será por años, el mejor espectáculo que se ha visto en este país y que sólo podría superar la propia Madonna.
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