Carlos Vives, Alejandro Sanz, Juan Fernando Velasco, Ricardo Montaner, Juan Luis Guerra y Miguel Bosé materializaron la idea de su colega colombiano Juanes, quien ubicó este evento justo al lado de la frontera con Venezuela, en el puente Simón Bolívar.
Se trató de una iniciativa “de hermandad entre los países” en medio de la crisis diplomática surgida por la incursión de militares colombianos el pasado 1 de marzo a Ecuador para matar a un jefe guerrillero.
Esa situación se calmó en una cumbre diplomática el 7 de marzo. Al cierre de esta edición, ninguno de los presidentes Hugo Chávez, de Venezuela; Rafael Correa, de Ecuador; y Álvaro Uribe, de Colombia, se había personado en el espectáculo musical.
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“Soñemos que los secuestrados, policías y militares vuelvan a casa”, expresó Carlos Vives, quien tuvo a cargo la apertura de la velada luego que un grupo de 35 niños de una orquesta y un coro juvenil de Colombia y Venezuela, todos vestidos de blanco, catalizaran la algarabía de unas 100,000 personas bajo un sofocante sol vespertino de primavera.
El colombiano se refería a los secuestrados en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Alejandro Sanz, el tercero en salir al escenario, manifestó que ahora “se está haciendo historia en esta frontera”, y aseguró que “el mensaje es muy claro: no queremos guerra”, informó EFE.
Uno de los momentos más emotivos ocurrió cuando el español Miguel Bosé abrazó fuertemente a un emocionado Juanes. Acto seguido, el resto de los invitados se unió a la tarima para unir sus brazos en otro llamado de paz.
“La música es un arma muy pacífica, y la gente que viene (al puente), viene, repito, para escuchar la música”, indicó Miguel Bosé, según Prensa Asociada.
Apoya a los soldados
Juan Esteban Aristizábal, nombre de pila del intérprete de “La camisa negra”, Juanes, saludó a un grupo de soldados heridos en combate en la sede de la trigésima Brigada del Ejército en Cúcuta.
“Nadie más que ellos, más que nadie conocen realmente la adversidad de un conflicto, porque son los que lo viven diariamente. En verdad quiero agradecerles por la valentía y el sacrificio”, dijo el artista a los uniformados.
Un vendedor ambulante cargado de camisetas y cintas blancas, Álvaro Riaño, expresó que, “como venezolano, estoy muy feliz de que se consolide la paz con nuestros hermanos colombianos”, pues garantiza a quienes “tenemos familia de lado y lado, no nos vemos afectados por las peleas de dos o tres gobernantes”, agregó a Prensa Asociada.
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