–Porque no estamos seguros y pensamos que con el tiempo nos vamos a decidir. (Sí, como no. Hágase el bobo que así se queda)
–Porque tememos hacer daño. (Sí claro, es la excusa para tener siempre todas las opciones)
–Porque no nos enseñaron a renunciar a algo. (Es culpa de esa señora, no de ella no. De su mamá que siempre le dio gusto en todo)
–Porque nos pareció fácil no decir nada y ahora no sabemos qué hacer. (Claro! típico de uds, tienen los pantalones para meterse y a la hora de enfrentar ahí sí no saben nada)
–Porque pensamos que no es necesario decirlo. (Miren, a las mujeres nos encanta que nos lo digan TODO. Hasta que NO nos quieren. Así quedamos tranquilas porque podemos decidir, algo que uds parece que no saben, nunca supieron y nunca sabrán!)
© CARACOL S.A. Todos los derechos reservados.
CARACOL S.A. realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados.