
"Siempre me he fijado en muchas estrellas del rock a lo largo de mi carrera, pero sin duda lo que más me ha marcado ha sido el estilo guerrero de Madonna. Es algo bastante evidente y que ningún artista puede ignorar", confesó la simpática intérprete a su paso por el programa de la televisión estadounidense Fashion Police.
"Es cierto que admiro a Madonna desde que era una niña y me encanta tanto su trabajo como su carácter. Pero también opino que somos dos artistas totalmente diferentes. Ella es Madonna y yo soy Paulina", indicaba al diario The Huffington Post.
De hecho, Paulina se apoya en su fructífera carrera profesional para afrontar con ilusión su día a día y, más concretamente, para obtener la energía que le permite entregarse por completo a la educación de su hijo Andrea Nicolás -fruto de su pasado matrimonio con Nicolás Vallejo-Nágera.
"Saco fuerza de mis canciones y de mis conciertos. Soy una mujer que comete errores, que se cae, pero que se levanta con más fuerza. Me siento muy poderosa gracias al amor de mi familia y al amor de mi vida: mi hijo de dos años", afirmaba al mismo medio.