Uruguay aplazó la clasificación de Colombia en tres minutos

Tota

Colombia estuvo a 13 minutos de clasificarse anticipadamente al Mundial hasta que llegaron los dos errores que significaron el 2-0 definitivo para Uruguay, que ahora está a la caza de un cupo directo, el de Ecuador, hacia Brasil 2014.

Durante 77 minutos, Amaranto Perea jugó brillantemente, fue el corrector de toda la defensa, pero un solo descuido compartido con Stefan Medina, echaron al traste su trabajo.

José Pékerman tenía muchas precauciones en Montevideo, el juego ante Uruguay no era fácil de llevar. Históricamente solo una vez Colombia pudo celebrar en la cancha del centenario, 40 años atrás, pero ni por las medidas de seguridad que el técnico de Colombia tomó, pudo evitar la derrota.

Buen primer tiempo, mal segundo

El partido tuvo un inicio trancado, con Colombia en la iniciativa y posesión del balón, buscando más que todo por el costado izquierdo, con Falcao García y James Rodríguez, que tuvo de media distancia el primer remate directo, al minuto 11.

Colombia se dio el lujo de ‘bombardear’ el área de Muslera, aunque los remates directos fueron escasos. Tanto Teo Gutiérrez como Falcao fueron axfixiados, salvo la jugada del minuto 26, donde Falcao se comió el primero tras recibir pase de Fredy Guarín, pero su definición pasó por el costado externo del palo izquierdo de Muslera.

A Uruguay le hizo falta Diego Forlán, que por lesión no pudo estar. El peso del ataque fue para Luis Suárez, que fue un todero solitario, él solo se encargó de llevar peligro y de tiro libre, al 42, tuvo su primera oportunidad, aunque antes había avisado con un doble amague que dejó ‘loco’ a Mario Yepes.

Recién empezó la segunda parte, Edison Cavani se dio media vuelta y en el borde del área sacó un zapatazo que devolvió el horizontal, en la opción más clara de gol hasta ese entonces.

Washington Tabárez envió a Walter Gargano por Álvaro González y a Cristian Stuani por Nicolás Lodeiro al jugar los últimos 45 minutos, Uruguay aumentó su agresividad, el partido creció, ambos ataques fueron más peligrosos y los delanteros empezaron a ganar en el encare a las defensas.

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