Artículo

Alejandra Azcárate le envía un mensaje por Instagram a su ex

Tota

La polémica comediante Alejandra Azcárate sorprendió a sus seguidores en Instagram con un mensaje que compartió dedicado a su ex, pues al reencontrarse con él en un aeropuerto, decidió escribir lo siguiente:

No te pierdas: Stephanie Cayo está feliz en Cartagena

"Donde uno menos piensa, le toca cumplir una cita con su pasado. Hoy, en pleno aeropuerto y lejos de imaginármelo, me encontré a un ex novio que adoré. Hace muchos años no lo veía porque de hecho no vive aquí, así que la sorpresa fue total. Nos saludamos con emoción y cariño, nos formulamos casi al tiempo las típicas preguntas de rigor y en cuestión de un par de minutos, lo único que empezó a gritarme el cerebro fue : Qué dicha no haber terminado junto a él. No necesité mucho tiempo para comprobar el por qué. Sus respuestas me demostraron que nuestras vidas nunca hubieran encontrado una razón de ser en común. Una de las cosas más valiosas que traen los años si son asumidos como un cúmulo de ricos aprendizajes y no como una vanidosa confrontación, es eso, la sensatez. No es fácil ser consecuente, no es sencillo comprenderse y menos aceptarse. Pero siento que ahora sé con mayor claridad lo que no quiero y lo que no merezco. Cuando esa zona se vulnera, de inmediato freno porque dejé de creer que aguantar es un sinónimo de paciencia. Ya no soy permisiva ni ilusa. Conservo las ilusiones que es distinto, pero no sobre la idealización si no sobre la realidad. No espero, valoro. Protejo mi mente, cuido mi cuerpo y no regalo mi energía. Qué rico no estar en la línea de los veinte añorando. De él esperé mucho en aquel entonces, me conformé con poco y terminamos en nada. Hoy, en esta brecha de los treinta y cinco para arriba, ya no tambalea mi seguridad porque no hago concesiones con mi tranquilidad, entendiendo que mi única obligación en esta vida es ser feliz porque morirme es una imposición. Nos abrazamos, nos despedimos y llegué a mi casa con la total certeza de querer estar ahí junto a quien me estaba esperando. La edad me supo rico. Que si me preocupa que el otro lea ésto? No. Ojalá lo haga. La sinceridad para mí es la única base de las relaciones verdaderas así ya no existan. Saben qué? Es delicioso crecer. Abrí la puerta, me recibieron con amor, respiré en paz, fui a mi baño a desempacar algunas cosas y al juntar los dos cepillos de dientes de inmediato entendí, que sin la menor duda supe escoger con quién reír".

 

Donde uno menos piensa, le toca cumplir una cita con su pasado. Hoy, en pleno aeropuerto y lejos de imaginármelo, me encontré a un ex novio que adoré. Hace muchos años no lo veía porque de hecho no vive aquí, así que la sorpresa fue total. Nos saludamos con emoción y cariño, nos formulamos casi al tiempo las típicas preguntas de rigor y en cuestión de un par de minutos, lo único que empezó a gritarme el cerebro fue : "Qué dicha no haber terminado junto a él". No necesité mucho tiempo para comprobar el por qué. Sus respuestas me demostraron que nuestras vidas nunca hubieran encontrado una razón de ser en común. Una de las cosas más valiosas que traen los años si son asumidos como un cúmulo de ricos aprendizajes y no como una vanidosa confrontación, es eso, la sensatez. No es fácil ser consecuente, no es sencillo comprenderse y menos aceptarse. Pero siento que ahora sé con mayor claridad lo que no quiero y lo que no merezco. Cuando esa zona se vulnera, de inmediato freno porque dejé de creer que aguantar es un sinónimo de paciencia. Ya no soy permisiva ni ilusa. Conservo las ilusiones que es distinto, pero no sobre la idealización si no sobre la realidad. No espero, valoro. Protejo mi mente, cuido mi cuerpo y no regalo mi energía. Qué rico no estar en la línea de los veinte añorando. De él esperé mucho en aquel entonces, me conformé con poco y terminamos en nada. Hoy, en esta brecha de los treinta y cinco para arriba, ya no tambalea mi seguridad porque no hago concesiones con mi tranquilidad, entendiendo que mi única obligación en esta vida es ser feliz porque morirme es una imposición. Nos abrazamos, nos despedimos y llegué a mi casa con la total certeza de querer estar ahí junto a quien me estaba esperando. La edad me supo rico. Que si me preocupa que el otro lea ésto? No. Ojalá lo haga. La sinceridad para mí es la única base de las relaciones verdaderas así ya no existan. Saben qué? Es delicioso crecer. Abrí la puerta, me recibieron con amor, respiré en paz, fui a mi baño a desempacar algunas cosas y al juntar los dos cepillos de dientes de inmediato entendí, que sin la menor duda supe escoger con quién reír. #másvivas

Una foto publicada por ALEJANDRA AZCÁRATE (@laazcarateoficial) el