Por lo general los hombres creen que son unos animales sexuales y que en la cama nadie les gana, tanto así que se cierran a la posibilidad de experimentar o dejar que la mujer guíen en ciertos aspectos para que ambos disfruten más.
Como es tan difícil saber si un hombre es bueno o malo en ese momento, algunos comportamientos los pueden delatar, así que ya no es necesario acostarte con él para poderlo juzgar.
El más evidente es cuando hablan de alguna mujer como un objeto sexual, ya que se enfocaron en solo buscar su placer y para que sea un encuentro exitoso ambos deben tener el mismo objetivo.
Otro aspecto a tener en cuenta es cuando se refieren al encuentro contigo como un negocio, un trato, donde tú solo serás una mercancía a conseguir.
Al momento de esperar un ascensor o alguna situación similar y en vez de esperar pacientemente, oprime el botón unas diez veces con desesperación, síntoma inequívoco de que son muy ansiosos en el tema sexual. Nada favorable.
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