
En este caso se vendió el condón más costoso del planeta, por un valor de 600 euros.
El preservativo data de inicios del siglo XIX y está fabricado con intestino de oveja, un material suave y elástico.
Lo que más llama la atención es la longitud del artículo ya que mide 19 cm, pues por lo general este tipo de artículos fabricados en esa época solo llegaban a los 15 cm.