040422 Asesinato_ Foto_ Getty Images

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“Miserable venezolano me lo mató”: Desgarrador relato del papá de futbolista asesinado en un robo

Un joven que era promesa del fútbol colombiano fue asesinado por robarle el celular, pese a que no se opuso a entregarlo.

njaramillo
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Este sábado 2 de abril, en la noche, se registró un nuevo caso de asesinato por robo de celular, el cual tiene conmocionado a todo Bogotá.

Miller Stiven Falla, una joven promesa del fútbol colombiano, fue asesinado en la localidad de Kennedy, en Bogotá, luego de que unos ladrones le quitaran el celular.

Jhon Falla, padre del adolescente, concedió una entrevista en Cómo amaneció Bogotá, de Tropicana, para contar cómo ocurrieron los lamentables hechos.

“Mi hijo salió a las 4:00 de la tarde de aquí de la casa para el centro comercial El Tintal, fue con unas compañeritas a comerse un helado, y como a las 8:00 de la noche ya venía para la casa y se metieron por una despatadita por la Av. Ciudad de Cali. Salieron tres venezolanos y los cogieron ahí, le apuntaron a una niña y les pidieron los celulares”, dijo.

El señor Jhon resaltó que él siempre le había aconsejado a su hijo que, si algún día ocurría un robo, entregara lo que le pedían, consejo que el joven siguió al pie de la letra. Sin embargo, los delincuentes terminaron disparándole.

“Él se alzó la camiseta y lo entregó (el celular). Él apenas lo entregó, el miserable venezolano me le metió un tiro sin tener compasión de mi hijo, y mi hijo pasándole el celular, él en ningún momento puso resistencia y me lo mató el desgraciado”, contó.

El padre del menor aseguró que, aunque lo llevaron al centro médico, allí murió.

“A mí hijo lo llevaron para la Clínica del Occidente, pero llegó con los signos vitales muy bajitos. Cuando yo llegué a la clínica, el médico me dijo: ‘no, don Jhon, hicimos reanimación, pero él no aguantó”, indicó.

Jhon pide a las autoridades que se haga justicia y que hagan algo respecto a los extranjeros que vienen a Colombia a hacer solo daño.

Cabe mencionar que Miller Stiven tenía 15 años y jugaba en un equipo afiliado a las divisiones inferiores del club América de Cali, en donde se destacaba por su talento.

“Él entrenaba acá con los inferiores de un equipo que se llama Andino, que es filial al América de Cali. Mi hijo desde los 5 años entrenaba fútbol y había mucha expectativa en la familia por ser un gran futbolista”, concluyó.

Escucha la entrevista completa aquí:

 

 

 

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