En Colombia hay millones de personas que están trabajando para lograr su pensión por vejez y disfrutar de sus últimos años con una mesada asegurada. En la actualidad se necesita de 1.300 semanas de cotización en fondos públicos o privados y de tener la edad mínima legal (57 años en mujeres y 62 en hombres) para poder lograr este derecho.
Sin embargo, no todas las peronas logran esta posibilidad por diferentes cuestiones como pérdida de empleo, inestabilidad laboral, entre otras tantas razones. Ante estos escenarios, el sistema pensional ofrece alternativas para que las personas que no alcanzan su jubilación, puedan acceder a otros métodos sin perder sus aportes acumulados.
Colpensiones, la entidad de administración pública de pensiones ofrece tres opciones para estos casos y que las personas no pierdan sus ahorros. De esta manera se atiende a aquellos trabajadores que cotizaron durante su vida productiva y que tienen un monto acumulado.
La Administradora Colombiana de Pensiones es la entidad encargada de gestionar el fondo público de pensiones y otros servicios que buscan la protección a la vejez. A continuación le presentamos las alternativas vigentes que tienen los usuarios que no generan su jubilación habitual.
Está dirigida a parejas en las que sus cónyuges o compañeros permanentes que no alcanzan a cumplir con los requisitos necesarios para tener una jubilación suman las semanas cotizadas de los dos para acceder al reconocimiento de pensión. De esta manera, logran asegurar un monto suficiente para su manutención y gastos habituales que requieren.
Son los Beneficios Económicos Periódicos y cuentan como una buena opción para quienes no pueden aportar mensualmente a pensión. Funciona como un ahorro voluntario y es ideal para quienes tienen bajos recursos o no alcanzan los aportes mensuales. Ofrece beneficios como un subsidio del Gobierno del 20% sobre el dinero ahorrado, así como un seguro de vida y auxilio funerario.
Corresponde a la devolución del dinero correspondiente a los aportes de pensión realizados por el usuario. Se otorga especialmente a aquellos que cumplieron la edad mínima pero no alcanzaron a reunir el número de semanas exigidas por el sistema y no tienen la posibilidad de alcanzar el número.
Por medio de un proceso de solicitud, la entidad otorga el dinero correspondiente a la cuenta bancaria del afiliado que pidió su dinero. De esta manera, está en libre disposición para usar su dinero en la alternativa que mejor considere.
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