En lo que se ha convertido en su primera experiencia como educador, el músico ha recurrido a la fusión de la teoría con las experiencias personales que acumuló desde su niñez, mientras seguía los pasos de su padre, el fenecido director musical Lito Peña.
“Para una mejor comprensión del tema que hablo con los estudiantes, hago muchos cuentos de cómo me desarrollé y de los consejos que me dieron, no sólo mi papá, sino otros arreglistas, y lo comparto con ellos. Como éstas son ya clases más detalladas y técnicas, pues, claro, tengo que hablar de cómo hacer algo y hay temas que obedecen a otro tipo de entorno más especializado. Según veo el interés de los muchachos, sobre lo que les causa más curiosidad es hacia donde trato de inclinarme y, al mismo tiempo, abriendo espacio a las preguntas”, narra el también productor a PRIMERA HORA, minutos antes de iniciar el seminario.
“Todo el mundo tiene la misma oportunidad… no necesariamente corre por la sangre. Lo natural en la familia de músicos es, al ver cómo tomaban la música mi padre, mis abuelos, mis tíos, que uno gravite hacia eso. No necesariamente es porque uno lo lleve en la sangre, sino porque lo respiras desde niño. Todo dependerá del trabajo que realices para poder conseguir algo”, añade.
Cucco Peña ofrece estas charlas una vez al mes a unos cuatro grupos de 15 estudiantes del curso “Recording Arts” y a los que completan un grado asociado en ingeniería y sonido. Ya ha realizado una serie de conversaciones con Erik Villegas, presidente y director de Allegro Music College, que lo convertirían en profesor regular de esta escuela de música.
Los seminarios que el músico conduce en estos momentos están dirigidos hacia la ingeniería, producción y arreglos musicales. “Hay que prepararlos un poco, en términos de lo que van a encontrar en el ambiente profesional y qué uno, como productor, espera de ellos”, subraya.
En un obscuro salón, los estudiantes oían atentos las técnicas que utilizó desde que se estrenó como productor hasta su veteranía. Nombres de figuras como Marc Anthony, Celia Cruz y Glenn Monroig, con los que ha trabajado en menudas ocasiones, se pasearon por el aula a modo de anécdotas. “Las anécdotas son para mantener la cosa ligera y tratando de no asustarlos o aburrirlos”.
“La respuesta que he tenido de los estudiantes es positiva porque, gracias a los años que llevo en esto y la experiencia con distintos artistas, sirve de estímulo y enseñanza y viene de alguien que no es maestro de oficio sino que sigue la materia y que trata este trabajo con otra visión. Mientras sienta que es de utilidad, lo voy a seguir haciendo porque da satisfacción a uno extenderle la mano a alguien en algo que los pueda ayudar a ser un buen profesional y escoger el camino de la música”, acota.
Sumergido en las noches cubanas
Cucco Peña ensancha las páginas de su experiencia musical con su incursión en la producción de cine norteamericana “Havana Nights”, que se rueda en la Isla desde principios de mes.
“Estoy haciendo los arreglos de la música de la película, compuse una canción y dirijo la orquesta en algunas de las escenas. Son temas que corresponden al Club Tropicana, que es donde hacen unas competencias de baile, y soy director de la orquesta”, cuenta.
“Havana Nights”, protagonizada por Diego Luna y Romola Garai, es una secuela de la recordada “Dirty Dancing” y ha utilizado como locaciones diversos rincones de la Isla, como Guaynabo, el Viejo San Juan y Ponce.
Cucco Peña trabaja, además, con el impulso de las carreras de los noveles cantantes Alejandra Taveda, quien arrancará en el género tropical, y Mike De Vito, quien se sumergirá en la salsa. El veterano músico participará igualmente del especial a Tito Puente, el 21 de abril en la ciudad de Nueva York.
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