Como bien sabemos, Severo Sinvergüenza es una heladería que no ha tardado en convertirse en tendencia gracias al sinfín de videos que se han hecho virales gracias a la ‘experiencia’ que brindan a sus clientes.
Si bien, el simple hecho de que sus wafles tengan formas de genitales ya era un hecho digno de controversia, lo que se vive dentro de este lugar acabó rompiendo con todo lo que puede llamarse moralmente correcto.
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Tal ha sido el alcance de estas grabaciones donde mujeres son tomadas para brindarles un show sumamente sexual que hasta la propia alcaldía y la Secretaría de Salud han tenido que hacer presencia en el lugar.
Y es que a causa de la exposición pública que ahora están teniendo, no es extraño que los medios acaben indagando a profundidad sobre lo que se vive allí.
La controversia lleva varios días y parece que no cesa, pues en W Radio se hizo público que se le estaban complicando las cosas a ‘Severo Sinvergüenza’, ya que al parecer hay algo más que oculta este negocio que puede traerles fuertes problemas legales.
Severo Sinvergüenza podría cerrar
Julio Sánchez Cristo, director de W Radio, fue el encargado de comentar sobre lo que sucedía, pues el principal factor que puede afectar ahora a este negocio es su ubicación, ya que, al ser una heladería, se encuentra en un sector de Cali en el que predomina la gastronomía, por lo que día a día pasan por allí familias y menores de edad, siendo espectadores de estos shows, pues recordemos que las paredes del local son en vidrio.
“Por esos cinco minutos de felicidad del fin de semana, no calcularon bien y la información que me llega es que las autoridades podrían intervenir el sitio”, mencionaron.
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Al parecer necesitarían reafirmar que el lugar se catalogue y tenga buenas practicas como ‘restaurante’, pues se puede llegar a confundir fácilmente con un negocio sexual, de ser focalizado como esto no podría seguir ejerciendo sus funciones en esta zona y se vería obligado a cerrar sus puertas para mudarse a otro sitio.
“Lo que le están pidiendo a la Alcaldía es que definan si es un restaurante o es un negocio sexual. Eso podría cambiar todo porque, por uso de suelo, si terminan definiendo que está relacionado con temas sexuales, allí no podría operar”, dijo Juan Pablo Calvás, periodista de la emisora.
