Este viernes 9 de junio se dio una noticia histórica que embargó de felicidad a todo el país. Los cuatro niños indígenas desaparecidos desde el pasado 1 de mayo en las selvas del Guaviare, finalmente fueron encontrados por miembros de las Fuerzas Militares.
La operación Esperanza duró 40 días desde que se reportó el choque de la aeronave tipo Cessna 206 con matrícula HK2803, cuando cubría la ruta Araracuara hacia San José del Guaviare.
Desde ese entonces, un cuerpo especial del Ejército Nacional junto a comunidades indígenas de la zona iniciaron una incesante búsqueda de los hermanos indígenas.
En medio del gran despliegue de las Fuerzas Militares, se dio a conocer que dos caninos hicieron parte de la hazaña. Dos perros, uno llamado Ulises y otro llamado Wilson. Los dos pastores belgas fueron los encargados en hallar las primeras pistas que dejaron los niños en la selva.
Pañales, un biberón y otros efectos personales de los pequeños fueron rastreados por los dos perros que fueron vitales en esta operación.
En los últimos días se dio a conocer que Wilson se extravió en las selvas del Guaviare, pero en las últimas horas el presidente Gustavo Petro también confirmó que el perro aun no aparece.
«Mañana trataré de hablar con ellos. Mañana cumple mi hija 15 años y es un regalo para ella y para Colombia. Y sobretodo un regalo a la vida, que es lo que significa nuestros niños cuidados por la selva. Las Fuerzas Militares me daban mensajes de encuentro de huellas que demostraban que estaban vivos. Yo pensaba que los tenían alguna comunidad indígena nómada que en esa región aun quedan (…) En realidad, en un momento encontraron un perro, se defendieron solos. Es su aprendizaje de vivir en la selva que los ha salvado», dijo el mandatario.
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