Uno de los intérpretes más importantes de la música vallenata, es el compositor y cantante Diomedes Díaz, quien, tras su muerte, dejó un importante legado a la cultura y el folclor vallenato.
El pasado 22 de diciembre se cumplieron 10 años de su muerte, pero esto no ha sido impedimento permanecer vivo en la memoria de sus fanáticos, quienes aún cantan a todo pulmón cada una de sus canciones que fueron todo un éxito en su carrera musical.
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Si algo caracterizó al Diomedes a lo largo de su trayectoria artística, además de su talento, fueron sus excentricidades y frecuentes escándalos que lo convertían en tema de conversación entre sus fanáticos, por lo que una década después de su muerte, esto no ha sido la excepción.
En el vallenato clásico, solían escucharse saludos que los artistas realizaban a la mitad de sus temas en los que nombraban a hombres y mujeres, lo que era todo un lujo para sus fanáticos.
Sin embargo, recientemente se conoció que estos saludos no eran gratis, pues los artistas solían cobrar una buena suma de dinero por ellos, es por esto que allí solo solían escucharse nombre de personalidades de la región.
Fue en medio de una entrevista con Juanpis González, el personaje de Alejandro Riaño, que el hijo mayor de Diomedes Díaz, Rafael Santos, y su acordeonero Jimmy Zambrano, revelaron la millonada en obsequios y dineros que recibía el artista por sus populares saludos.
“Le daban una camioneta, 50 millones de pesos por un saludo, y hasta 100”, mencionó Zambrano.
El acordeonero resaltó que este tipo de saludos en las canciones del género vallenato es un arte de improvisación, pues dicha dedicatoria debe ir acorde a la música y al acordeón.
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