La triste historia detrás de ‘Nadie es eterno en el mundo’ de Darío Gómez

Tota

Cuando Darío Gómez era un pequeño niño vio como su padre Marco Aurelio sometía a su madre a seguidos planazos de machete y le partía la naríz a la señora Abigail Zapata, sino le hubiera quitado la escopeta de las manos y no le hubiera dado un tiro en el pecho a su padre, lo más seguro es que su madre hubiera sido asesinada.

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Desde entonces Gómez nunca superó esa situación, pensó en suicidarse muchas veces, luego conoció a Olga Lucía Arcila y se enamoró, pero ya se había casado a los 19 años con Marta Nubia Pineda con quién tuvo tres hijos.

En 1978 logró ser un éxito mundial y se llamó El Rey del Despecho. Cuando regresó a la tierra que lo vio nacer y junto a su amigo de infancia Luis Ernesto, entraron a un cementerio y este le dijo: “Hombre Darío, vos sos capáz de hacer una canción de esto”.

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A lo cual él respondió: "sí y se llamará Nadie es eterno en el mundo", cuatro meses después su amigo murió y en el 2002, una bala perdida mató a su hija Luz Dary
 

 

Video: Youtube.com/NOEL FONNEGRA